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| Graciela Pecci /Fotografía: Gloria Ferrés |
En esta edición les presentamos a Graciela Pecci, propietaria de la boutique “María Candela”. Graciela es una mujer dinámica, emprendedora y siempre actual. Estar al frente de “María Candela” no sólo la ha hecho ser autosuficiente desde muy joven, sino también volverse una especie de trotamundos, pues cada año viaja a distintos destinos, desde Nueva York a Dubai para abastecer su concurridísima boutique.
Este año, Graciela Pecci inicia las celebraciones de los 45 años de la apertura de “María Candela”, una boutique que desde 1967 acompaña a la mujer paraguaya vistiéndola tanto para su día a día como para sus más glamorosas noches. Desde estas páginas nos unimos a su celebración, invitándolos a conocer más sobre esta extraordinaria mujer que lleva trabajando en el rubro de la moda desde hace más de cuatro décadas.
¿Cómo y cuando nace la boutique María Candela?
¡Ay, éramos tan jóvenes! Corría el año 1966 cuando junto a mis dos hermanas, a mi mamá y a mi abuela decidimos crear juntas nuestra boutique como un proyecto familiar.
¿Cómo surge el nombre?
Este nombre siempre me había gustado por ser diferente. No era un nombre común. Lo había elegido para mi hija que no había nacido aún, pero terminó siendo el nombre de mi boutique. Pero este año, nace mi octava nieta, ¡que se llamará Candela!
¿Cómo fueron los inicios de la tienda?
Fueron muy tranquilos, tejíamos en familia y cada quien tenía su parte en la elaboración de las prendas. Empezamos con máquinas semi industriales. Hacíamos desfiles que si bien eran muy importantes, también eran muy familiares. El primero lo hice en casa de mis padres. Mis modelos eran mis amigas, luego las amigas de mis hijas. Hasta los sobrinos desfilaron, porque María Candela en una época también se dedicó a los peques.
¿Qué razones te llevaron a elegir dedicarte a la moda?
Para mí la moda es arte y yo me enamoro de todo lo artístico. Es maravilloso ver los colores y sus posibles combinaciones en las prendas. Es un constante desafío a lo creativo.
¿En todos estos años como fue evolucionando María Candela?
Evolucionó mucho, exigida por los tiempos que corren y me alegra ver los resultados. En un inicio también confeccionamos prendas by María Candela, teníamos nuestros pequeños talleres. Y luego vinieron los accesorios. Hoy contamos con todos los artículos para las necesidades de la mujer moderna, actual y con poco tiempo. Y para las que tienen mucho tiempo, es un placer distraerse con tanta variedad de accesorios.
¿En tantos años como propietaria de una boutique, cuales son las cosas más importantes que aprendiste?
Principalmente aprendí a crecer, en todos los aspectos. También a relacionarme con la gente y a desplazarme por el mundo. Para mí fue una escuela en el arte del relacionamiento, de las negociaciones y de las finanzas
Hoy en día tus hijas también forman parte del equipo de María Candela. ¿Cómo es la experiencia de trabajar en familia?
Yo crecí, con la ayuda de mis hijas Geraldine y Maia y de mi yerno Marcelo. Ellas crecieron y se formaron con ideas y conceptos modernos que contribuyeron mucho al desarrollo de María Candela. Y mi yerno, nuestro asesor financiero, también contribuye enormemente para tener siempre resultados positivos. Ellos me acompañan día a día. Puedo decir que seguimos muy en familia.
¿Cómo es la clientela de María Candela?
¡Sin lugar a dudas multifacética!
¿Cómo definirías el estilo de las prendas que se pueden encontrar en tu boutique?
Son modernas, básicas, cómodas y por sobre todo, me exijo tener todo lo último que sale en los centros internacionales del mundo de la moda, como New York, Dubái y Milán.
¿Qué significan para vos estos 45 años de María Candela?
Es una gran parte de mi vida, yo sólo tenía 20 años cuando empecé. Así como crie a mis hijos, paralelamente le dedicaba tiempo a mi MARIA CANDELA. Es mi obra, que con perseverancia la fui haciendo, sin escatimar tiempo y dedicación. Hoy comprendo, que hubo un tiempo que enseñé a mis hijos ahora yo aprendo de ellos .Como no sentir tanta felicidad, por todos estos años y esta realidad que me enorgullece. Viajé mucho y nunca desaproveché las oportunidades de hacer conocer lo que estaba a mi alcance. Hablo de muchos años atrás, cuando éramos poquísimas las casas de moda. Hoy es una competencia muy fuerte, que me exige día a día. Me causa satisfacción seguir presente hoy y haber recorrido estos 45 años.
¿Cómo seleccionan las prendas y cuál es el proceso desde que las adquieren hasta que las ponen a la venta?
Las selecciono yo misma con la ayuda de mis dos hijas. Al ser ellas más jóvenes, miran la moda con otros ojos. Me han acompañado en muchos viajes. Luego viene el trabajo que no se ve y que es mucho, como digo yo: detrás de bambalinas.
¿Qué tienen planeado para celebrar el aniversario de María Candela?
Estamos inaugurando el próximo año un nuevo local en un nuevo shopping. Me gustan los desafíos, me hacen sentir que tengo energía y muchas ganas de estar presente en el mundo laboral.
¿Cuál es la mayor satisfacción que te dio María Candela?
Sentirme autosuficiente, conocer tan importantes centros de la moda y darme una importante apertura en mi vida personal.
¿Qué proyectos tienen para el futuro?
Seguir, presente en el mundo de la moda, siempre con arte y buen gusto. Sería para mi otra gran satisfacción, que mis hijas continúen, cuando yo ya no este.
Este año, Graciela Pecci inicia las celebraciones de los 45 años de la apertura de “María Candela”, una boutique que desde 1967 acompaña a la mujer paraguaya vistiéndola tanto para su día a día como para sus más glamorosas noches. Desde estas páginas nos unimos a su celebración, invitándolos a conocer más sobre esta extraordinaria mujer que lleva trabajando en el rubro de la moda desde hace más de cuatro décadas.
¿Cómo y cuando nace la boutique María Candela?
¡Ay, éramos tan jóvenes! Corría el año 1966 cuando junto a mis dos hermanas, a mi mamá y a mi abuela decidimos crear juntas nuestra boutique como un proyecto familiar.
¿Cómo surge el nombre?
Este nombre siempre me había gustado por ser diferente. No era un nombre común. Lo había elegido para mi hija que no había nacido aún, pero terminó siendo el nombre de mi boutique. Pero este año, nace mi octava nieta, ¡que se llamará Candela!
¿Cómo fueron los inicios de la tienda?
Fueron muy tranquilos, tejíamos en familia y cada quien tenía su parte en la elaboración de las prendas. Empezamos con máquinas semi industriales. Hacíamos desfiles que si bien eran muy importantes, también eran muy familiares. El primero lo hice en casa de mis padres. Mis modelos eran mis amigas, luego las amigas de mis hijas. Hasta los sobrinos desfilaron, porque María Candela en una época también se dedicó a los peques.
¿Qué razones te llevaron a elegir dedicarte a la moda?
Para mí la moda es arte y yo me enamoro de todo lo artístico. Es maravilloso ver los colores y sus posibles combinaciones en las prendas. Es un constante desafío a lo creativo.
¿En todos estos años como fue evolucionando María Candela?
Evolucionó mucho, exigida por los tiempos que corren y me alegra ver los resultados. En un inicio también confeccionamos prendas by María Candela, teníamos nuestros pequeños talleres. Y luego vinieron los accesorios. Hoy contamos con todos los artículos para las necesidades de la mujer moderna, actual y con poco tiempo. Y para las que tienen mucho tiempo, es un placer distraerse con tanta variedad de accesorios.
¿En tantos años como propietaria de una boutique, cuales son las cosas más importantes que aprendiste?
Principalmente aprendí a crecer, en todos los aspectos. También a relacionarme con la gente y a desplazarme por el mundo. Para mí fue una escuela en el arte del relacionamiento, de las negociaciones y de las finanzas
Hoy en día tus hijas también forman parte del equipo de María Candela. ¿Cómo es la experiencia de trabajar en familia?
Yo crecí, con la ayuda de mis hijas Geraldine y Maia y de mi yerno Marcelo. Ellas crecieron y se formaron con ideas y conceptos modernos que contribuyeron mucho al desarrollo de María Candela. Y mi yerno, nuestro asesor financiero, también contribuye enormemente para tener siempre resultados positivos. Ellos me acompañan día a día. Puedo decir que seguimos muy en familia.
¿Cómo es la clientela de María Candela?
¡Sin lugar a dudas multifacética!
¿Cómo definirías el estilo de las prendas que se pueden encontrar en tu boutique?
Son modernas, básicas, cómodas y por sobre todo, me exijo tener todo lo último que sale en los centros internacionales del mundo de la moda, como New York, Dubái y Milán.
¿Qué significan para vos estos 45 años de María Candela?
Es una gran parte de mi vida, yo sólo tenía 20 años cuando empecé. Así como crie a mis hijos, paralelamente le dedicaba tiempo a mi MARIA CANDELA. Es mi obra, que con perseverancia la fui haciendo, sin escatimar tiempo y dedicación. Hoy comprendo, que hubo un tiempo que enseñé a mis hijos ahora yo aprendo de ellos .Como no sentir tanta felicidad, por todos estos años y esta realidad que me enorgullece. Viajé mucho y nunca desaproveché las oportunidades de hacer conocer lo que estaba a mi alcance. Hablo de muchos años atrás, cuando éramos poquísimas las casas de moda. Hoy es una competencia muy fuerte, que me exige día a día. Me causa satisfacción seguir presente hoy y haber recorrido estos 45 años.
¿Cómo seleccionan las prendas y cuál es el proceso desde que las adquieren hasta que las ponen a la venta?
Las selecciono yo misma con la ayuda de mis dos hijas. Al ser ellas más jóvenes, miran la moda con otros ojos. Me han acompañado en muchos viajes. Luego viene el trabajo que no se ve y que es mucho, como digo yo: detrás de bambalinas.
¿Qué tienen planeado para celebrar el aniversario de María Candela?
Estamos inaugurando el próximo año un nuevo local en un nuevo shopping. Me gustan los desafíos, me hacen sentir que tengo energía y muchas ganas de estar presente en el mundo laboral.
¿Cuál es la mayor satisfacción que te dio María Candela?
Sentirme autosuficiente, conocer tan importantes centros de la moda y darme una importante apertura en mi vida personal.
¿Qué proyectos tienen para el futuro?
Seguir, presente en el mundo de la moda, siempre con arte y buen gusto. Sería para mi otra gran satisfacción, que mis hijas continúen, cuando yo ya no este.
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