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martes, 5 de mayo de 2015

TENDENCIAS EN TRAJES DE NOVIA 2014




Por más de que los vestidos de novias aparentan ser los más tradicionales del planeta, hay muchas tendencias que se van incorporando en ellos, es solo cuestión de prestar atención y enfocarse en los detalles y verán mucho más que mero género blanco.
Pretty in Pink: Hay un importante destaque de las tonalidades rosas y salmones en las colecciones internacionales. Ya sea asignando al rosa como sustituto ideal del tradicional blanco nupcial, o coloreando de estos tonos acentos y detalles, los diseñadores han apostado por este color como la principal tendencia. La novia de Oscar de la Renta por ejemplo vistió un vestido de chiffon rosa pálido. Vera Wang lanzó una colección completamente teñida de rosa, con una paleta que fue del rosa pastel al fucsia.

Minimalista y moderna: Varios diseñadores han abrazado el lema del “menos es más” –algo muy refrescante en el muchas veces recargado traje de novia. La silueta de los vestidos se va ciñendo más al cuerpo, se reducen los bordados a su mínima expresión o su desaparición total, y los encajes se emplean meramente como detalles delicados y sobrios. En este tipo de diseños, la seda tiene un gran destaque. Monique Lhuillier, habitualmente volcada más hacia los excesos, reflejó claramente un regreso al minimalismo en su última colección de novias.

Sixties: los años sesenta también se instalaron con fuerza en la tendencia nupcial, con escotes reminiscentes a los tradicionales vestidos Jackie, y cortes que nos recuerdan a la adorable Sabryna interpretada por la icónica Audrey Hepburn. También las asimetrías en el ruedo, con vestidos más cortos adelante y más largos atrás nos remiten a la década de los sesenta. Muchos diseñadores también propusieron sobrefaldas removibles que al terminar la ceremonia pueden quitarse para dejar ver un vestido al cuerpo o  incluso pantalones, como propone Rosa Clara.



Destaque a la espalda: la espalda de los vestidos cobra importancia, dejando ver más piel con el uso de encaje e incluso tiras cruzadas de encaje o tiras bordadas con pedrería en la espalda. Se reducen los escotes al frente, pero se compensa dejando mucho de la espalda al descubierto. Ángel Sánchez y Temperley apostaron por esta tendencia.

Al tobillo: una importante tendencia fue la del acortar el ruedo de los trajes de novia mostrando varios modelitos al tobillo. Técnicamente esta tendencia podría bien caer dentro de la tendencia de los años 60’s, ya que por esa década era muy habitual que las novias optaran por este largo. Pero la tendencia del nuevo largo tuvo tanto peso propio, que preferimos mantenerla como categoría. Carolina Herrera, Marchessa y Monique Lhuillier tuvieron varios modelos con faldas anchas pero hasta el tobillo.

Degradé: ideal para aquellas mujeres que apuestan al color pero no se animan a lucir el color pleno en el día de su boda, pueden elegir un vestido en degradé, donde el tono elegido, ya sea el beige, el rosa, el salmón o el lavanda se va decolorando gradualmente hasta llegar al blanco. Monique Lhuillier, J. Mendel y la marca Theia apostaron a esta original propuesta.

Blanco y Negro: una de las tendencias más atrevidas (teniendo en cuenta de que se tratan de vestidos de novia) es la del incorporar el negro al tradicional blanco. El negro viene por lo general empleado sólo como un detalle, ya sea unos breteles, uno cinto o en apliques de encaje. El blanco y negro sin lugar a dudas en una opción chic y dramática para decir un sí inolvidable. Vera Wang y Jesús Peiro brindaron algunas opciones con esta combinación fuera de lo común.
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martes, 5 de agosto de 2014

Alber Elbaz: Fantasías en chiffón




"Lo que me llevó a querer trabajar en la moda no fue la historia del diseño ni las ropas, sino la fantasía de las mujeres.”
-Alber Elbaz

Desde que asumió como director creativo de Lanvin en 2001, convirtió a esta casa de moda en una de las más reverenciadas de la industria. ¿El secreto? Saber fusionar la herencia de esta marca antigua y sofisticada con su toque distintivo: sutil, femenino y moderno.

Nacido en 1961 en Casablanca, Marruecos, Elbaz fue criado en Israel desde los 10 años por lo que se considera a sí mismo más israelita que marroquí. Se podría decir que el color siempre estuvo presente en su vida, su padre era pintor y su madre colorista en una peluquería. Su amor por el dibujo y por la moda se desarrolló muy pronto. El diseñador asegura que a los siete años tomó la costumbre de retratar todos los días a su profesora, prestando especial atención a lo que ésta llevaba puesto. De niño, mientras dibujaba vestidos en su pequeña habitación soñaba que se encontraba en París. Muy pronto sus sueños se harían realidad.

Al terminar la escuela y tras concluir su servicio militar en el Ejército Israelí decidió estudiar  Moda y Diseño Textil en la Universidad de Shenkar. Al graduarse en 1985 empacó sus maletas y se mudó a la Gran Manzana, donde trabajó durante 7 años con Geoffrey Beene. Este diseñador le enseñó a rechazar las tendencias y concentrarse en el estilo y también lo ayudó a conocer el arte del drapeado. En el ’96 su sueño parisino se cumplió cuando fue nombrado jefe de la línea de pret-a- porter de Guy Laroche, Paris y director de Yves Saint Laurent Rive Gauche en 1998. Según el propio diseñador, este no fue un asenso en su carrera, sino la realización del sueño de su vida.

De todas maneras, este sueño duraría poco ya que al comprar el grupo Gucci la línea YSL Rive Gauche en el 2001, Tom Ford, el nuevo director creativo de Yves Saint Laurent, quien quería encargarse personalmente de todas las responsabilidades de diseño, lo despidió. Así un muy alicaído Alber fue a parar trabajando brevemente para Krizia en Italia hasta que llegó una oferta irresistible. En el 2001 es nombrado director creativo de Lanvin y su sueño parisino volvió a materializarse y esta vez ya no se escaparía de sus manos. 

Hoy, 12 años después, Elbaz sigue al frente de la casa francesa y se ha ganado la reputación de ser uno de los más talentosos diseñadores de nuestro tiempo. En el 2005 fue galardonado como mejor diseñador internacional por la CFDA y en el  2007 el gobierno francés lo nombró Caballero de la Legión de Honor. Estas distinciones se sustentan en el hecho de que Elbaz adora a las mujeres, y ellas lo saben, motivo por el cual adoran los diseños de Elbaz. Al respecto, el diseñador asegura: “Yo amo y respeto a la mujer…Como sabrán, nuestro logo de Lanvin es una madre con su hija. Siempre he dicho: no es un león y no es un caballo. Es una madre con su hija y encuentro a este logo especialmente emotivo.”

Además de la moda, Elbaz es un apasionado de la ilustración. Todo un artista a la hora de bocetar, sus ilustraciones muchas veces se escapan de las paredes del atelier apareciendo en packagings, remeras y por supuesto hasta en las prendas diseñadas por Alber.

Elbaz domina no sólo el arte del diseño, sino también es uno de esos diseñadores que comprenden que en la moda, lo comercial no debe ser tenido encuentra solamente por los departamentos comerciales de la marca. Al fin y al cabo, la ropa debe ser bella y ponible a la vez. Elbaz es uno de esos diseñadores que comprenden el arte y el pragmatismo del diseño por lo que todas sus colecciones son bien recibidas tanto por la crítica como por la clientela. La prueba de esto se vio con la colección que diseñó en Noviembre de 2010 para H&M, que fuera una de las más exitosas colaboraciones de la historia de esta tienda. Los fans hicieron filas larguísimas la noche antes con tal de poder comprar algo diseñado por uno de los más queridos y prestigiosos diseñadores de la Alta Moda.

Quienes lo conocen aseguran que además de creativo, Elbaz es muy histriónico y divertido. Un hombre de grandes dimensiones y gran personalidad quien asegura no entender como siendo tan maniático con el orden no puede resistirse a un pedazo de torta. En una entrevista reciente el diseñador se describió a sí mismo como una “contradicción con patas”, agregando: “Amo la primera clase, pero no me gusta la gente de la primera clase. Prefiero a la que viaja en Turista. Me gustan los restaurantes finos, pero prefiero el sabor de McDonalds. Me gusta ser perfecto, pero no me gusta la perfección- creo que es peligrosa. No hay nada después de la perfección.”

Sus muy humanas contradicciones sumadas a su gran sentido del humor lo hacen agradable – algo difícil en el competitivo mundo de la moda- pero su talento lo hace especialmente adorable. Sus diseños no solamente son etéreos, femeninos y gráciles, sino también son sumamente cómodos y prácticos y usables. En su practicidad se nota que a la hora de inspirarse para diseñar tiene muy en cuenta lo que quieren las mujeres y también todo lo que hacen y hasta como se sienten. Elbaz asegura que quiere que sus clientas no sólo se sientan hermosas, sino que también puedan manejar un auto y disfrutar de un postre con sus vestidos

Otra de sus ideas es la de que el lujo no debe intimidar. “Todos creen que el lujo debe ser muy intimidante; uno entra a la tienda y todo debe verse como una farmacia. Pero adivinen qué? No estamos comprando Tylenol! Estamos comprando una cartera roja, un zapato de diamante y un vestido estampado, por lo que creo que debería haber un poco de levedad, y ser menos estrictos con todo”, así se explayó el diseñador sobre su idea del lujo en una entrevista para el diario The Independent. En el 2012 puso hechos para sustentar sus palabras, lanzando un irreverente video para la colección de otoño invierno de la refinada casa francesa, en el cual los y las modelos bailaban vestidos con los lujosos y sofisticados trajes de Lanvin, desenfadadamente al son de “I know you want me” de Pitbull.

Todas las mujeres, jóvenes y viejas, flacas y formosas, se rinden por igual a los pies de Alber Elbaz. En el mundo de la moda, se le rinde una especie de culto tanto por su gran personalidad como por su enorme talento.

Lo suyo son las siluetas estructuradas, la simplicidad de la forma, la generosidad de los volúmenes y tamaños y el lograr prendas que impactan por su femineidad y que nunca pasan de moda. Ya que sus diseños juegan con la fantasía y con la convicción de que un vestido de chiffon roja siempre logra hacer que una mujer se sienta maravillosa.


viernes, 4 de abril de 2014

TENDENCIAS DE TEMPORADA OTOÑO INVIERNO 2014



De París a Nueva York, pasando por Londres y Milán en el camino, hacemos un recorrido de las tendencias de las colecciones del Otoño-Invierno 2013 europeo, que sin lugar a dudas serán los pilares de las tendencias de este hemisferio durante nuestro otoño invierno 2014.

En líneas generales se vieron muchos contrastes, como es de esperar, ambigüedad entre lo masculino y femenino, fuerza y fragilidad, opulencia y simplicidad, pasado y futuro. Estos contrastes reflejan las múltiples facetas de la mujer del siglo 21, y el hecho de que cada vez hay una mayor tendencia por parte de los diseñadores de permitir que cada una de sus clientas celebre su estilo personal, pues al fin y al cabo las tendencias de la pasarela deben ser traídas a la tierra por la clientela.

Les invitamos a descubrir las tendencias principales vistas en las pasarelas europeas para que encuentren aquellas que más se adecuan a su estilo personal. 

EL NUEVO NEGRO: Si en el verano, el blanco fue el nuevo negro, en esta temporada el lugar del “new black” es ocupado por el azul marino o navy. Oscuro, intenso y clásico, este color es muy combinable y una muy acertada opción para la temporada. Este color se llama azul marino, no por el hecho de que refleje los colores del mar, sino por el hecho de que se popularizó gracias al uniforme de la Real Armada Británica. Chloé y Celine proponen un look azul marino de pies a cabeza, Dries Van Noten y Jil Sander lo combinan con marrón chocolate y gris. Una inversión segura será un abrigo oversize en este color, un ítem clásico que nunca pasará de moda.

PIELES EXÓTICAS: Las pieles son sin lugar a dudas los elementos más polémicos de la pasarela. Algunos diseñadores proponen pieles de visón mientras otros se ciñen a la tendencia animalista proponiendo pieles sintéticas. Esta temporada las pieles, ya sea en sus versiones reales y sintéticas, vienen en colores llamativos, en tramados bicolores y tricolores en los cuales el negro se intercambia con detalles de amarillo neón o fucsia, y el marrón se intercala con el verde o el rojo. Así fueron las pieles vistas en los desfiles de Roberto Cavalli, Fendi y Versace. Como estas son tendencias muy ligadas a esta temporada y de difícil transición, una inversión segura será optar por pieles sintéticas con estas características.

TWEED: Este tejido invernal por excelencia, lleva a la lana a su expresión más chic. La precursora del empleo del tweed en la indumentaria femenina fue Coco Chanel, quien feminizó este material que antes era empleado exclusivamente para las prendas masculinas, motivo por el cual es un tejido siempre presente en las colecciones de esta casa. Además de Chanel, este tejido se vio en las pasarelas de Dolce&Gabbana, Haider Ackerman, Lanvin y Ungaro. El tweed es siempre una inversión segura, ya que es un clásico eterno, sin embargo recomendamos sus versiones más ligeras para nuestro invierno de temperaturas no tan bajas.

CUADROS: Los cuadros escoceses en todas sus combinaciones del rojo, al azul y al negro y al marrón también son ya elementos clásicos del invierno. Esta temporada la influencia grunge fue muy fuerte, por lo que los cuadros escoceses tuvieron un marcado revival tras el furor que tuvieron durante la primera mitad de los años 90. Saint Laurent optó por una interpretación bien grunge de los cuadros, Celine los interpretó de manera más masculina y Stella Mc Cartney imprimió con sus tramas sus abrigos oversize. También estuvieron presentes en las colecciones de Lanvin, Louis Vuitton, Jean Paul Gaultier (un adicto a ellos) y Dolce & Gabbana. Una inversión segura: una falda tipo Kilt es algo que nunca pasará de moda, sin embargo opten por largos a media pierna o a la rodilla ya que las versiones muy cortas pueden llevar a tristes reminiscencias de disfraces de colegiala traviesa.

PLUMAS DE AVESTRUZ: Típicamente estas plumas se emplean para adornar las colecciones de alta costura, sin embargo en esta temporada hicieron un salto a las colecciones de pret-á –porter para acentuar las propuestas nocturnas. Predominantemente en negro, se las vieron en las colecciones de Gucci, Dries Van Noten, Vivienne Westwood, Louis Vuitton, Proenza Schoulder y Oscar de la Renta. Una inversión segura: Una boa de plumas no tan larga llevada al cuello como bufanda puede servir para dar un toque de estilo a un clásico saco negro.

BOTAS BUCANERAS: Como nunca, las botas de cuero a medio muslo tuvieron una presencia destacada en las pasarelas. Se las vio en casi todas las colecciones, desde Chanel, Balmain, Pucci, Celine hasta Donna Karan y H&M. Se vieron muchas versiones en gamuza negra y también en cuerina elastizada para sus versiones más entalladas. Chanel en realidad propuso una especie de polainas en cuero híper ajustados que se metían dentro de botinetas dando la sensación de ser medias bucaneras de cuero o botas bucaneras. Una inversión segura serán las botas elastizadas ya que son muy cómodas y también pueden remangarse y usarse debajo de pantalones.

REVIVAL DEL GRUNGE: Esta temporada se propuso el regreso triunfal de la moda grunge. La pasarela se vio vestida con una onda muy rockera y reminiscente a la época del grunge que surgió a fines de los 80’s y siguió hasta mediados de los 90’s. También se le dio toques punk, con tachas y cuero. Sin lugar a dudas la pasarela de Saint Laurent fue la que más se ciñó a este estilo rebelde y relajado. También se vieron influencias grunge en Pucci, Rodarte, Vivienne Westwood y Haider Ackermann. Una sugerencia de inversión es optar por una buena camisa a cuadros que combinada con una t-shirt básica puede dar el toque grunge a tu look.

CRUDO INVIERNO: Nunca esta frase fue mejor interpretada en la pasarela. Muchas colecciones se tiñeron de colores crudos y claros acompañados de blanco, tonos antes insólitos para la temporada otoño invierno, pero ya incluidos en las colecciones invernales desde hace un par de años. Valentino, Isabel Marant, Celine, Stella McCartney, Elie Saab, Mugler y Nina Ricci le dijeron sí a esta tendencia. Una inversión segura sería optar por un saco corto crudo, híper combinable y de fácil transición.

ESTAMPADOS JUVENILES:  Los diseñadores apostaron por variados estampados, algunos más girlie y otros totalmente infantiles, desde personajes Disney como Bambi, hasta motas, estrellas y corazones invadieron los tejidos de esta temporada. Estuvieron muy vistas en las colecciones de Saint Laurent, Givenchy, Burberry Porsum, Hermes, Lanvin Kenzo y Paul & Joe. Una inversión segura: una camisa o pañuelo con un estampado de estrellas, motas o corazones, puede darle un toque divertido a tu look y tener una fácil transición a futuras temporadas.

HOMBROS XL: La tendencia oversize estuvo muy presente en los abrigos y sacos. En Balenciaga, Alexander Wang presentó abrigos y sacos cortos con hombros amplios y redondeados, rindiendo un claro homenaje a la era de Cristobal Balenciaga, fundador de la casa. Gucci, Stella McCartney, Proenza Schouler, Balenciaga, Givenchy, Carven y Kenzo también optaron por esta silueta. Una inversión segura: abrigo Oversize puede dar esa comodidad de movimientos cuando hace mucho frio y queremos encimarnos sweaters y camisetas sin sentirnos embutidas.


miércoles, 2 de abril de 2014

La moda Vintage




Mucho se habla hoy de moda vintage. Se trata de una palabra francesa empleada en las vendimias para referirse a los vinos producto de sus mejores cosechas. El término por lo tanto adquirió la acepción de calidad y antiguo o añejo, que más bien es algo que el tiempo ha mejorado. Resulta natural que este término se extendiera para aplicarse a las prendas y accesorios que han sobrevivido la prueba del tiempo, ganando encanto con el transcurrir de los años y en tan buenas condiciones como para ser empleada hoy en día por mujeres apasionadas por la moda y la historia.

Muchos se preguntarán ¿en qué momento se puso de moda usar prendas pasadas de moda? Pero como todos los apasionados por la moda sabemos, ésta tiende a repetirse, y las prendas vintage justamente tienen a su favor el hecho de que pueden mantenerse vigentes sin dar a quien las lleva el aspecto de alguien pasado de moda, sino todo lo contrario.

A la moda vintage a veces se la asocia con las ropas usadas, con las ropas antiguas y con las ropas retro. Por lo que antes de proseguir es necesario aclarar bien las diferencias entre cada uno de ellos. Las prendas vintage, sin bien en muchos casos fueron usadas con anterioridad, no necesariamente son usadas. A veces se encuentran en tiendas vintage, prendas que tienen aún las etiquetas puestas, ya sea porque su dueño nunca llegó a estrenarla o porque se tratan de muestras o stock antiguo de tiendas. El ser usada por lo tanto no es un prerrequisito para que la prenda sea considerada vintage. Tampoco todas las ropas usadas pueden considerarse vintage. Las ropas deben tener al menos 20 años para ser consideradas vintage (osea que deben ser al menos del 1993). Esta regla no se aplica a las prendas de diseñador, que pasan automáticamente a ser consideradas vintage al pasar la temporada. 

Ahora pasemos a la diferenciación entre vintage y antiguo. Si bien muchas veces uno puede encontrar vestidos muy viejos en las boutiques vintage, de los años 50 o 60, los expertos en la materia hacen una distinción entre lo vintage y lo antiguo. Todas las prendas producidas antes de 1920 son referidas como ropas antiguas por lo que no entran en la categoría del vintage. Esta diferenciación tiene una razón muy práctica. La ropa anterior a los años 20 es muy difícil de poder llevarse hoy en día debido al estado de conservación de las prendas, y como la idea de la moda vintage es vestir la prenda, las prendas muy antiguas y frágiles no pueden comercializarse como vintage. 

El último término con el que debemos hacer una distinción es el término “retro”. Las prendas retro están inspiradas en una determinada época de la moda, ya sea años 50 o años 40, pero no son de esa época, sino que fueron confeccionadas contemporáneamente por diseñadores que se inspiraron e imitaron estilos llevados en tiempos anteriores. Una prenda retro puede estar hecha hace solo unos meses, sin embargo para que una prenda sea vintage, es necesario que hayan pasado al menos 20 años.

Si bien las modas de tiempos anteriores siempre han generado un sentimiento de fascinación y de nostalgia en los fashionistas del mundo, la moda de llevar prendas vintage surgió en los años 90. Las prendas vintage tuvieron un auge de popularidad en años recientes. Esto se debió indiscutidamente al hecho de que muchas estrellas de Hollywood optaran por llevar prendas vintage a los eventos de alfombra roja. Uno de los momentos más memorables de la moda vintage ocurrió en el 2001 cuando Julia Roberts deslumbró a todos llevando un espectacular modelo vintage de Valentino a la entrega de los Oscars, y no sólo se llevó la estatuilla a mejor actriz sino también se ganó el primer puesto en todos los rankings de mejor vestida. Desde entonces empezó el ascenso de la popularidad de la moda vintage en el mundo.

Por lo general las prendas vintage no son muy costosas, pero obviamente hay excepciones. Cuando las prendas son de alta costura y sobre todo de diseñadores famosos, los precios pueden escalar vertiginosamente. Un vestido de Christian Dior de la época del New Look de Dior, es un preciado tesoro que puede valer varios miles de dólares, así como un vestido de gala diseñado por la Schiaparelli. Las prendas que están sin uso y que conservan aún las etiquetas originales también tienden a tener un precio considerablemente mayor a aquellas que fueron previamente usadas. Hoy en día muchas personas coleccionan prendas vintage, ya sea vestidos de alta costura, carteras de diseñador, sombreros o pañuelos de seda firmados. Las prendas coleccionables también tienden a tener un mayor valor. Los coleccionistas ven a las prendas vintage como verdaderas inversiones, ya que con el tiempo, lo más probable es que su valor aumente.

 Los rasgos más apreciables de la moda vintage son su historia, su hechura, su estilo, género y diseños. Son prendas que reflejan una era y vienen cargadas de una historia y una energía muy especial. También son prendas únicas, irrepetibles y es virtualmente imposible de encontrarse con otra persona con el mismo estampado o el mismo modelo. Generalmente traen ligada la historia de quien las llevó, del momento para el cual fueron creadas, del diseñador o la modista que la idearon y confeccionaron y de la estética de una época determinada en la moda.  Por este motivo, así como ocurre con las antigüedades, el origen de las prendas vintage suele ser muy importante para los coleccionistas y expertos en la materia.
Los fanáticos de la conservación del medio ambiente también aprueban el empleo de prendas vintage ya que sin lugar a dudas es una manera de reciclar, instalar en la mente de la gente el valor de lo usado y antiguo y la idea de reparar en vez de desechar. De hecho muchas veces las boutiques vintage reparan las prendas antes de ponerlas a la venta y también hacen pequeños cambios para darles un aire más contemporáneo o formas más favorecedoras. Si las prendas están en muy mal estado, los encargados de las tiendas muchas veces encuentran objetos para rescatar, ya sea un trozo de género, un cuello de encaje o los botones.

Los amantes de la moda vintage, muchas veces se enamoran de la historia de la prenda, tanto como de la prenda misma. Como que tienen un encanto especial que las hace distintas. La moda vintage nos narra una historia, muchas de las veces más ornamentada e interesante de la que nos narran los productos producidos en masa de hoy en día. Al verlas no se puede evitar imaginarse lo que sintió su dueña original al comprarla o al lucirla para algún acontecimiento especial. ¡De seguro sus dueñas las amaron tanto que no se quisieron desprender de ellas, y este es el motivo por el cual llegan a las boutiques vintage tantos décadas después!