viernes, 28 de noviembre de 2008

Historia de las Pelucas


En los últimos tiempos la peluca ha perdido su rol como elemento de uso cotidiano y ha sido relegada a cubrir problemas capilares o a ser utilizada en el teatro o en fiestas de disfraces. Seguramente, la mayoría de nuestros lectores solo cuenta con una peluca 100% poliéster de colorido estridente que completaba su último disfraz de payaso. Sin embargo, por verdaderos milenios, la peluca ha tenido un rol importantísimo en el atuendo cotidiano.



Las primeras pelucas surgen 7000 años atrás con los asirios, que consideraban tan importante al cabello que la calvicie total o parcial, se consideraba un defecto antiestético ocultado mediante pelucas.

Los más asiduos portadores de pelucas en la antigüedad fueron los egipcios. Debido al calor extremo y la abundancia de piojos, tanto hombres como mujeres acostumbraban llevar la cabeza rapada y en ocasiones especiales cubrirla con elaboradas pelucas trenzadas rematadas en cuentas de oro y marfil. Las mismas indicaban el lugar que uno tenía en la sociedad (como siempre, mientras más alto el rango más elaborada la peluca). Algunas de estas pelucas eran enormes y muy pesadas. La peluca que llevaba la reina Isimkheb en las grandes ocasiones pesaba tanto que necesitaba ayuda para poder caminar. Para evitar que las pelucas olieran mal se ponían unos conos de cera perfumada sobre ellas.
Al comenzar el siglo 1 a.C. las pelucas rubias hicieron furor en Roma (porque por supuesto los hombres siempre las han preferido rubias). Las vanidosas romanas cortaban las magníficas cabelleras blondas de las “barbies” de la época, las cautivas bárbaras germanas. Pero con el correr del tiempo, las pelucas rubias acabaron por convertirse en el signo distintivo de las prostitutas e incluso de quienes las frecuentaban. Tanto la libidinosa emperatriz Mesalina, como el lujurioso Calígula, solían pasearse por los burdeles con sus pelucas blondas en busca de placeres. La peluca rubia era el equivalente a las botas blancas y las minis escandalosas de las prostitutas modernas.

Al emerger la Iglesia Católica, las pelucas fueron asociadas a los paganos y por ende perseguidas por la Iglesia. Desde el siglo 1º hasta el 629, una persona con peluca no podía recibir una bendición cristiana. Las pelucas eran vistas como vanidosas invenciones del diablo.

Con el renacimiento reaparecieron las pelucas gracias a Isabel I de Inglaterra, quien poseía una colección enorme de pelucas anaranjadas que usaba para ocultar el retroceso frontal de su cabello y su progresiva calvicie. Hasta su archirival, María, reina de los escoceses, llevaba una peluca color caoba, pero este hecho nadie lo supo hasta que fue decapitada y junto con su cabeza rodó su peluca revelando su bien guardado secreto de tocador.


A inicios del 1600 la calvicie prematura del rey Luis XIII de Francia, puso de moda el uso de pelucas en la corte y al poco tiempo toda la nobleza europea estaba imitándolo.

Las pelucas no solo eran empleadas para mejorar la apariencia y ocultar la calvicie. También eran necesarias debido a las insalubres condiciones de vida y costumbres antihigiénicas de la época (de las cuales no se salvaban ni siquiera los Palacios Reales). Se creía que mojarse enfermaba y por ende, tanto los baños como las lavadas de cabeza eran infrecuentes. El “aroma” se ocultaba con perfumes pero los piojos eran más difíciles de erradicar. En estas circunstancias era más fácil raparse la cabeza y usar una peluca para prevenir los piojos.

Las pelucas eran utilizadas solo por las personas más pudientes pues eran muy costosas (a menudo eran la pieza más cara de la indumentaria) y acarreaban un elevado costo de mantenimiento. En el apogeo de la popularidad de las pelucas en Francia del siglo XVII, 40 peluqueros eran empleados permanentemente en Versailles para atender las necesidades de las pelucas de la corte.

Hacia el siglo XVIII, las pelucas eran tan costosas que a menudo las robaban. Los ladrones de pelucas iban por las calles más transitadas llevando sobre sus hombros un cesto con un niño oculto en su interior. El niño se levantaba súbitamente para apoderarse de las pelucas de los distraídos transeúntes.

Hacia esta época el tamaño y la ornamentación de las pelucas también se volvieron sumamente elaborados. Las mujeres llevaban pelucas tan altas que debían ser armadas sobre estructuras metálicas y cubiertas con ungüentos para mantener los cabellos en su lugar. Como estos materiales generalmente eran de origen orgánico y tenían un lento tiempo de secado, creaban el hábitat ideal para animalitos indeseados. Hay numerosas historias sobre mujeres que al ponerse sus pelucas se encontraron con ratones que habían decidido anidar en ellas.

Las ornamentaciones se fueron volviendo cada vez más excéntricas. Algunas mujeres muy imaginativas empezaron a adornar sus pelucas temáticamente con variados motivos. Algunas empotraban pequeñas jaulas con pajaritos vivos en sus pelucas. Otras recreaban jardines en miniatura con estatuas incluidas. Tal vez el caso más famoso fue el de la peluca que recreaba una escena marítima con la réplica en miniatura del barco “La belle poule”, para celebrar su victoria en una batalla. Hacia el final de la era barroca, los tocados habían alcanzado insólitas alturas de hasta 60 cms!
Las pelucas eran empolvoreadas para ocultar la diferencia entre pelos naturales y postizos así también como para aclararlas al gusto de la época. Incluso la gente que no podía permitirse una peluca, se empolvoreaba su propia cabellera para que pareciese una peluca. En 1795 se impuso un impuesto en el polvo blanco y tanto el uso del polvo como las pelucas fueron cayendo en desuso.

Actualmente se ha visto un renacer de las pelucas en la forma de extensiones o alargues. Estos son mechones postizos de pelo natural o artificial que se trenzan directamente sobre el pelo tanto para aumentar instantáneamente el largor de la cabellera o para dar más volumen al look. Famosas modelos y estrellas como: Elle Mac Pherson, Kyle Minogue, Beyonce Knowles, Naomi Campbell y Paris Hilton son fanáticas declaradas de las extensiones.



Los peluquines o bisoñés son otras pelucas que siguen vigentes hoy en día para ocultar la calvicie masculina. Sin embargo, nuestros metrosexuales y cuarentones en crisis no tienen la misma soltura que los cortesanos franceses del siglo XVIII que no tenían problemas en admitir orgullosamente ser propietarios de docenas de pelucas de distintos largores y colores. Hoy en día los peluquines son vistos como elementos ridículos y su uso es un secreto de estado celosamente custodiado por sus propietarios.


Actualmente las judía ortodoxas siguen utilizando pelucas cotidianamente; pero éstas no lo hacen por vanidad sino por todo lo contrario. Los judíos ortodoxos consideran al cabello femenino como un factor de atracción sexual tan provocativo que debe ser cubierto con una peluca.

El atractivo sexual y vital del pelo es algo innegable. El cabello abundante, brillante y bien cuidado ha sido objeto de admiración y deseo desde la antigüedad. Esto se debe a que nuestro cabello es el reflejo de nuestra salud y nuestro vigor. Es por esto que durante siglos hombres y mujeres se han esforzado tanto en aparentar mejor cabello del que realmente tenían. Las pelucas y apliques han sido fieles aliados a la hora de transformar el aspecto, acentuar la exhuberancia de la cabellera y disimular la alopecia o simplemente la calamidad capilar matutina de esos días en los que nuestro pelo simplemente no amanece bien.


Hoy en día, una gran cantidad y variedad de productos cosméticos ayudan a solucionar la mayoría de los problemas capilares contra los cuales lucharon nuestros ancestros. Ahora, la peluca ha dejado de ser una necesidad cotidiana para convertirse en un elemento de diversión, de juego y de renovación en nuestras vidas.

lunes, 24 de noviembre de 2008

ABANICOS MENSAJEROS

En estos calurosos días de verano subtropical quien no ha buscado automáticamente cualquier cartoncito a mano para aliviar el calor. Por supuesto que esto es solo un auto engaño, pues lo más probable es que el papelito que encontramos no refresca ni a una mosca. Ni bien hallamos refugio en un ambiente bajo cero logrado gracias a nuestros modernos sistemas de refrigeración, nos detenemos a preguntarnos como hacían nuestras abuAñadir imagenelitas para aguantar el sofocante clima. Por supuesto que inmediatamente damos gracias a Dios por haber nacido en el siglo XX.

Pero muchísimo antes de la llegada del aire acondicionado, el hombre se ingenió para mitigar los rigores del clima valiéndose de los elementos que tenía a su alcance. Probablemente el origen del abanico se remonta a los primeros hombres, que al descubrir el fuego necesitaron avivarlo con algún tipo de pantalla.

Pero el abanico propiamente dicho surge hacia el año 3.000 a.C. de manera simultánea en dos culturas muy diferentes: Egipto y China. En Egipto los primeros abanicos estaban hechos tradicionalmente de plumas de pavo real, palmas entrelazadas o papiros y además de refrescar y espantar insectos, eran un símbolo diferenciador de clases y tenían un importante uso ceremonial. En Egipto, los ricos tenían un “abanicador” y el faraón tenía un “potador del abanico real”. Estos eran esclavos que movían continuamente enormes abanicos de papiro tejido para refrescar a sus amos. La sombra proyectada en el piso por los abanicos era terreno prohibido para la gente común.

En la China, estos eran elaborados de papel o seda y sostenidos por un palo de bambú o de madera laqueada. Los chinos, al contrario de los egipcios, eran más democráticos pues se abanicaban ellos mismos. Las mujeres chinas, aisladas y sometidas a una férrea autoridad masculina, fueron las primeras en encontrar en el abanico un importante aliado a la hora de burlar los su rígido aislamiento, creando un lenguaje secreto, el nu shu para comunicarse entre ellas mediante mensajes escritos o bordados en sus abanicos.

En el siglo VI d.C., los japoneses copiaron el abanico chino y a su más puro estilo, lo mejoraron, creando el abanico ple­gable o sensu. Cuenta la leyenda que un obrero llamado Tamba lo inventó inspirado en la manera en que los murciélagos plegaban las alas durante su vuelo. En Japón, el abanico adquirió gran relevancia y pasó a formar parte de la indumentaria habitual de sus ciudadanos de ambos sexos. Los abanicos tenían usos distintos según su tela, color y diseño. Las mujeres usaban abanicos de baile, de corte, y de té; mientras que los hombres usaban los abanicos de montar y los de combate.



Durante la Edad Media en Europa se usaban flabelos, que eran abanicos hechos de plumas de pavo real, avestruz, papagayo o faisán sujetas a un mango de oro, plata, o marfil y que más que refrescar servían para espantar moscas.

El abanico plegable llega a Europa en el siglo XV, traído por los mercaderes que comerciaban en Oriente. Carlos V (1338-1380), rey de Francia, tenía dos abanicadotas que lo refrescaban durante las comidas.

Para el siglo XVII, el abanico se convirtió en un accesorio indispensable para las damas de la corte. Estos eran creados como auténticas joyitas, confeccionadas con ébano, carey, marfil, encajes y exquisitas telas bordadas y pintadas a mano por los más renombrados pintores de l época con pintorescas escenas.

El abanico era una pieza clave del vestuario de una dama elegante (ningún vestido estaba completo sin el abanico) y se podía determinar la posición social de una mujer con una sola ojeada a través del abanico que llevaba y la forma en que lo manejaba. Su uso se generalizó tanto que el escritor inglés Joseph Addison afirmó que una mujer sin abanico estaba tan incómoda como un hombre sin espada. Y es que, los abanicos, además de ser instrumentos de ventilación eran eficaces medios de comunicación para transmitir discretos mensajes -sobre todo aquellos de índole amorosa- entre las damiselas custodiadas por sus chaperonas y los galanes que las cortejaban. Incluso aparecieron manuales que instruían a las mujeres sobre el lenguaje del abanico. Charles Francis Bodini publicó en 1797 el libro El telégrafo de Cupido, en el que establece todo un auténtico alfabeto “abanical”.

En Francia las mujeres solían colocar entre las varillas de sus abanicos unas pequeñas ventanillas por las que podían observar disimuladamente a los cortesanos. Se cuenta que la aristócrata escritora Ninón de Lenclós tenía uno con lentes colocados en esas ventanillas con lo que conseguía curiosear a pesar de su miopía. La coqueta Madame Pompadour dio su nombre a una variedad: de montaje calado, esculpido y decorado con motivos de flores o frutas.

A lo largo del siglo XIX era frecuente que las jóvenes de buena familia recibieran clases de baile, al mismo tiempo, sobre todo en Inglaterra, las señoritas eran instruidas en el manejo del abanico. Según opinión francesa, por la manera de coger un abanico "se distinguía a la princesa de la condesa".

No se puede dejar de mencionar a España en la historia del abanico, pues en este país la costumbre del abanico quedó tan arraigada que hasta hoy en día el abanico sigue siendo muy difundido en todo el país y su industria abaniquera sigue siendo muy importante. Las condiciones climáticas de España, han contribuido a que perdurase el uso del abanico no sólo como elemento de adorno y moda, sino también por necesidad. Lo mismo sucede en nuestras latitudes, donde por herencia española así como por la inclemencia del verano eterno, el abanico sigue siendo muy utilizado.

El abanico fue siempre un leal compañero de la mujer en el arte de seducir. Extendió con gracia sus gestos y le permitió comunicarse con discreción con sus pretendientes. Actualmente, el abanico, si bien a dejado de ser un medio de comunicación, sigue siendo un detalle mágico y gracioso, así como también algo infinitamente práctico y necesario a la hora de socorrernos cada vez que nos encontramos en los terriblemente odiosos ambientes no climatizados.

EL LENGUAJE DEL ABANICO
Tocarse la mejilla derecha con el abanico: Sí
Tocarse la mejilla izquierda con el abanico: No
Entregar un abanico cerrado: ¿Me quieres?
Cubrirse la cara con un abanico medio abierto: Ten cuidado
Girar el abanico con la mano izquierda: Nos están mirando
Girar el abanico con la mano derecha: Quiero a otra persona
Abrir y cerrar el abanico para luego apuntar hacia un sitio: Espérame ahí
Abrir y cerrar el abanico varias veces: Me has tratado muy mal
Bajar el abanico: Sólo somos amigos
Abanicarse lentamente: Soy una mujer casada
Abanicarse rápidamente: Estoy comprometida
Abrir el abanico a la mitad: Espérame
Tocarse el ojo derecho con el abanico: Quiero verte
Cubrirse los ojos con el abanico abierto: Te amo.
Cerrar lentamente un abanico totalmente abierto: Me casaré contigo
Llevar un abanico cerrado colgando de la mano derecha: Deseo comprometerme
Contar las varillas del abanico: Quiero hablar contigo
Un abanico medio abierto tocando los labios: Bésame
Un abanico cerrado tocando los labios: Por favor, no cuentes mi secreto
Quitarse el pelo de la frente con la base del abanico: No me olvides. Pienso en ti
Mover el abanico cerca de la frente: Has cambiado
Tocar el corazón con el abanico: Te has ganado mi amor
Dejar caer el abanico: Soy tuya
Golpearse la mano izquierda suavemente con el abanico: Quiéreme
Tocar la palma de la mano con el abanico: Dudo que nuestra relación sea conveniente
Aparecer en el balcón con el abanico en la mano: Hoy voy a salir
Dejar el abanico en el balcón: Hoy no voy a salir
Llevar un abanico abierto en la mano derecha: Eres demasiado apasionado
Llevar un abanico abierto en la mano izquierda: Sentémonos a hablar
Examinar el motivo pintado en el abanico: Me siento atraída por ti
Agitar un abanico cerrado: Eres imprudente
Cambiar el abanico de mano: Estás mirando a otra
Abanicarse con la mano izquierda: No coquetees con esa mujer
Tocarse la nariz con el abanico: Sospecho que algo va mal
Cerrar el abanico de golpe: Estoy celosa
Golpear algo con el abanico cerrado: Estoy impaciente
Ocultarse del sol con el abanico: Eres feo.
Sostener un abanico abierto con las dos manos: Olvídame
Entregar un abanico a la madre o acompañante: Todo ha terminado entre nosotros



viernes, 21 de noviembre de 2008

DEL BOLSILLO AL BOLSO: Nuestro Universo Portátil

-¿No tenés una moneda de quinientos?- me preguntaba la cajera amablemente. Yo no estaba segura. Abría el monedero. Vacío. De todas maneras respondía con absoluta confianza: -¡seguro que tengo alguna en mi cartera!- mientras empezaba a revolver frenéticamente su contenido. A medida que revolvía, iba sacando los más surtidos cachivaches: la agenda con mil papelitos sueltos con anotaciones (como si sus hojas no bastaran), el perfumito, la crema para las manos, los anteojos, celular, la billetera, el estuche para el maquillaje a punto de estallar, la factura de la tintorería, el ticket de estacionamiento que perdí la semana pasada, las llaves, los 5 bolígrafos que nunca encontraba a la hora de hacer el cheque, la chequera, un libro…. mi mano se paseaba ciega, palpando el fondo, los costados, abriendo bolsillos, agitando, removiendo, esquivando. La fila se impacientaba. “¡Ndeeee!” exclamaba fastidiado un señor detrás mío mientras entornaba los ojos impacientes. Mi mano se aceleraba, nerviosa, explorando ese espacio profundo y oscuro. Cuando a mi cartera ya no le quedaba ningún secreto más para revelar, mis dedos emergieron triunfantes. “¡Acá está! ¡Yo sabía luego!” Exclamaba feliz como si acabara de ganar un premio, mientras extendía la moneda de quinientos a la cajera. Al alejarme, agendaba mentalmente limpiar mi cartera, preocupada por la cantidad de cosas con la que andaba en cima. Luego me tranquilizaba a mí misma: “menos mal que dejé de fumar, así ya no ando con los cigarrillos, los encendedores (generalmente 1 mío y 2 de mis amigas sustraídos por “error” cuando no encontraba el mío en la cartera), las mentitas y los insoportables residuos de tabaco que lo invadían todo.” ¡Ahora si que ando ligera!

Estoy segura de que no soy la única mujer con complejo de hormiguita viajera. No exagero al afirmar que somos legión. Una mujer sin su cartera está desnuda, desarmada, vulnerable, incompleta. Ni bien empezamos a usarla nos sentimos impulsadas a llenarla al máximo de su capacidad, convirtiéndola en el depósito portátil para todas nuestras probables necesidades, un salvavidas para posibles emergencias y la fiel guardiana de nuestros secretos.

Un aura de misterio envuelve al bolso cerrado. Una mirada curiosa puede ser interpretada como una violación al espacio más privado de su propietaria. Extraños poderes hacen que allí desaparezcan objetos con una facilidad poco usual y que en los momentos más difíciles aparezcan, como por arte de magia, los artefactos más inverosímiles listos para solucionar cualquier tipo de problema (como una amiga que en una emergencia fashion sacó un martillo de su cartera para clavar un taco roto).

La cartera se ha convertido en un accesorio vital para la mujer moderna que, siempre en constante movimiento, necesita tener a mano todo lo necesario para cumplir con sus mil diligencias diarias. A veces una cartera resulta insuficiente y la complementamos con bolsos deportivos, de bebé, de playa, maletines o simples bolsas de plástico. Cargamos con tantas cosas que no es de extrañar que los hombres no nos comprendan y sigan preguntándose por qué nuestro problema no se soluciona con un bolsillo. Pero lo que pocos saben es que todo empezó con un simple e inocente bolsillo.


En sus inicios el bolso era una especie de bolsillo y el bolsillo era una especie de bolso. Nacieron juntos pero con el transcurrir del tiempo fueron tomando caminos separados: el bolso se desprendió de la prenda convirtiéndose en el apéndice obligado de toda mujer y el bolsillo se adhirió a la ropa para convertirse en todo el espacio portátil que un hombre necesita.

En la antigüedad las pertenencias se transportaban en pequeños bolsitos de piel o tela que parecían bolsillos colgantes sujetados alrededor de la cintura. Las primeras versiones usadas tanto por hombres como por mujeres eran bolsillos individuales pero con el tiempo se hizo costumbre el uso de dos bolsitas que colgaban a ambos lados de la cadera. Irónicamente, a medida que uno subía en la escala social, el tamaño de sus bolsillos se iba reduciendo. Los bolsillos de los de la clase alta eran más pequeños pues no necesitaban acarrear gran cosa. Solo algunas monedas, sales aromáticas o alguna coquetería como un pañuelo bordado, un peine o espejito. Los de la clase trabajadora necesitaban más espacio, pues tenían que acarrear desde sus utensilios de trabajo hasta sus almuerzos en ellos. Como solo los de las clases altas tenían acceso a lugares seguros para guardar sus objetos de valor, los más humildes tenían que andar siempre con sus pertenencias a cuestas.

En el medioevo, los feligreses colgaban alrededor de sus cinturas unas bolsitas llamadas limosneras que contenían monedas para donaciones. Con el tiempo, sus fines caritativos se fueron volviendo más mundanos y como siempre sucede en el mundo de la indumentaria, lo netamente utilitario se fue volviendo ornamental.

Un detalle curioso es que muchas veces los bolsos que contenían monedas eran entregados junto con las monedas al realizar un pago. (Se imaginan hoy en día desprenderse de su cartera al efectuar un pago!) En las audiencias reales era costumbre dejar como lisonja bolsitos bordados repletos de monedas. En la Corte de Isabel I de Inglaterra, la cantidad que debía dejarse estaba estipulada por decreto.

Hasta finales del S. XVI, era costumbre el uso de chatelaines, especie de llaveros que colgaban de la cintura de la ama de casa. Los chatelaines contenían una serie de utensilios de uso cotidiano: implementos de costura, de escritura, llaves y una pequeña bolsita; cada uno sujeto a una cadenilla separada que se unía con las otras en un manojo. También habían chatelaines especiales para fiestas, que contenían botellitas con maquillaje y sales aromáticas (para revivir de los desmayos causados por los ajustados corsettes), abanicos, espejitos y pequeños coqueterías.

A fines del Siglo XVI las mujeres empezaron a llevar los bolsos colgados debajo de sus amplias faldas. Se accedía a ellos mediante pequeños tajos en los pliegues de los vestidos. Los bolsos internos eran más seguros, pues los bolsos colgantes externos eran muy fáciles de robar. La amplitud de sus miriñaques les permitía llevar muchísimas cosas sin llamar la atención. Esto probablemente fue el origen de la costumbre femenina de cargar con tantas cosas a cuestas.

En 1790, la Revolución Francesa, al resucitar las líneas clásicas, estiliza la silueta femenina, dejando fuera de moda las faldas amplias. Los angostos vestidos de la nueva moda seguían la línea del cuerpo impidiendo ocultar con discreción nada debajo de ellos. El corte imperio eliminaba la cintura como foco de atención. Esto presentaba otro dilema: de donde colgar los bolsos: ¿en la cintura o en el talle elevado del vestido? Como solución, las mujeres, que no querían dañar con bultos indeseados la proporcionada estética de sus túnicas, pero que tampoco estaban dispuestas a desprenderse de la comodidad de sus bolsos, volvieron a llevarlos externamente. Pero ahora ya no los ataban a la cintura, sino que los llevaban colgando del brazo. Estas pequeñas bolsas bordadas de seda o terciopelo y cerradas con cordones o cadenitas se llamaban retículas. Como las retículas eran en esencia las mismas bolsas colgantes que habían sido llevados junto a la ropa interior por tanto tiempo, era inevitable que se las asociara con las prendas íntimas, y eran llamadas burlonamente “ridículas”. A pesar de todas las bromas iniciales generadas por su uso, las retículas siguieron de moda por más de 100 años.

Las retículas eran accesorios exclusivamente femeninos y sustituyeron a los bolsillos que cayeron en desuso entre las damas. Los bolsillos pasaron a ser usados solo por niñas, ancianas y mujeres trabajadoras (pues eran seguros para guardar dinero). En esta misma época aparecieron los abrigos masculinos con bolsillos externos, innovación que hizo que los hombres abandonen definitivamente las carteras por los bolsillos.

Desde entonces, a la hora de guardar sus pertenencias, los hombres encuentran todo el espacio que necesitan en sus bolsillos mientras que las mujeres solo encuentran en ellos lugar suficiente para sus manos. Para las mujeres los bolsillos han perdido totalmente su función práctica y son meramente decorativos. Cualquier bultito amenaza engrosar una silueta cada vez más fina. Por lo que la mujer seguirá llevando sus amadas carteras.

A partir de 1880, los adelantos tecnológicos facilitaron los viajes y los bolsos, que habían surgido inicialmente como alternativa a los bolsillos, se convirtieron en un producto de consumo masivo, produciéndose en variados diseños y en los materiales más surtidos. Pocos saben que Louis Vuitton empezó haciendo baúles para los viajes en barco de Napoleón III y que tanto Prada como Gucci empezaron produciendo equipaje.

A medida que la mujer moderna se movilizaba, iba a bailes, viajaba, trabajaba, las carteras se convirtieron en compañeras indispensables, siguiéndolas a todas partes y ayudándolas a afrontar con glamour las nuevas responsabilidades y desafíos que implica balancear los niños, la casa y el trabajo sin perjudicar el look. Hoy en día existen carteras de todo tipo y para cualquier momento o lugar imaginable y éstas se han convertido en los best sellers de las más famosas casas de moda.

Las carteras son mucho más que accesorios de moda. Son compañeras prácticas, versátiles, divertidas y amadísimas por sus propietarias, llegando incluso a reflejar ciertos aspectos de su estilo y personalidad.

Hoy en día, hasta los hombres están volviendo a usar carteras, como lo hicieron en la antigüedad. A medida que la silueta masculina también se afina, y bajo la excusa de necesitar transportar su “lap top”, muchos se están uniendo silenciosamente a las filas de las mujeres adictas a transportarlo todo.

TACONES LEJANOS: La evolución del Taco en el Calzado de Mujer


El diseño del calzado de mujer ha ido cambiando y evolucionando a lo largo de la historia según cada época y región. Se podría afirmar que los primeros calzados fueron las sandalias utilizadas en Egipto y en la zona Mesopotámica. El diseño de estas sandalias obedecía a la necesidad de proteger los pies de las inclemencias del tiempo y del terreno. Las primeras sandalias por lo tanto obedecían principalmente a cánones de comodidad y utilidad, pero poco a poco, la coquetería y vanidad femenina fueron imponiendo ciertos cambios. El tamaño, la forma y los materiales empleados fueron así evolucionando, pero el cambio principal, que luego pasaría a convertirse en característica casi exclusiva del calzado femenino, fue la altura del taco.

Resulta evidente que la necesidad, la comodidad o la utilidad no fueron parámetros tenidos en cuenta en el momento en que se decidió elevar a la mujer por las alturas. Los chinos empezaron a utilizar tacones en los diminutos calzados de pie de loto, producto de la despiadada costumbre iniciada en el sigo VII de atrofiar los pies de las mujeres nobles. A partir de los 6 años los pies eran atados y deformados durante el crecimiento. Los dedos eran obligados a crecer hacia adentro, para alcanzar la deseada medida “perfecta” de 10 cm. Esta práctica era un símbolo de status social ya que solo un noble podía permitirse el “lujo” de tener una mujer improductiva que a duras penas solo podía caminar distancias cortas.

En Manchuria, zona que rivalizaba con la China Imperial, a las mujeres se les prohibía adoptar la costumbre china de deformar sus pies. A pesar de esta prohibición, las mujeres se ingeniaron para imitar a las chinas, utilizando unos zapatos apoyados en unas plataformas de base pequeña, que les daba la apariencia de tener los tan “atractivos” pies de loto y las obligaba a caminar con pasitos pequeños, caminata que era considerada de suma elegancia.

En Japón, las Geishas acostumbraban usar unas ojotas elevadas sobre una base rectangular de madera que tenía dos dientes de entre 5-10 cm. de altura. Estos calzados eran llamados Geta. Debido al clima lluvioso del Japón, estas ojotas eran muy útiles para evitar que las Geishas estropearan sus preciosos Kimonos manchándolos con el barro de las calles. La muy conocida tradición japonesa de quitarse los zapatos al entrar a una casa probablemente deriva del hecho que estos zapatos eran muy dañinos para los delicados pisos de las casas japonesas. De hecho, hasta hoy en día los estantes donde uno deposita sus zapatos a la entrada de una casa se llaman getabako o caja para geta.

Las mujeres musulmanas también lucían plataformas similares para proteger sus pies del polvo de las calles y de los pisos de los baños públicos del imperio Otomano. En el Líbano, las mujeres de los harenes solían usar un sueco de madera elevado sobre dos dientes, llamado kapkap. Este nombre deriva del ruido que hacían estos zapatos sobre los pisos de mármol del Harén.

En Occidente, curiosamente los primeros en usar tacones fueron los hombres. Alrededor del Siglo XVI, los jinetes empezaron a usar tacos para evitar que se resbalaran sus pies en los estribos de sus monturas. Con el tiempo, el taco de jinete fue haciéndose más y más alto, hasta el punto de dejar de ser apropiado para montar. Su uso quedó limitado a las cortes europeas donde eran usados por los nobles. En 1533, la diminuta Catalina de Medicis, encomendó a un zapatero la confección de unos zapatos con tacón para parecer más alta en su boda con el Duque de Orleáns. Catalina en su afán de ganar altura, se apropió de un diseño militar para librar una batalla personal contra su pequeña estatura, convirtiéndose en la primera mujer en usar tacos e imponiendo la moda de los tacones para las mujeres en la corte francesa.

Tal vez uno de los zapatos más absurdos fueron los célebres chapines venecianos. Estos verdaderos pedestales, elevaban a las damas de la época a alturas ridículas. Algunos llegaron a medir más de 50 cm. Los chapines eran una especie de zancos de madera utilizados por las patricias de la alta sociedad Veneciana. Su uso fue pronto imitado por las célebres cortesanas venecianas y difundido por toda Europa. Estos calzados eran verdaderos símbolos de status, pues solo una mujer adinerada podía permitirse elevarse literal y simbólicamente por encima de la plebe. Los chapines limitaban tanto el movimiento de la mujer, que para salir, ésta necesitaba ir acompañada por dos lacayos que le ayudaban a mantener el equilibrio. Las mujeres venecianas se convertían así en estatuas vivientes que paseaban orgullosas, elevándose sobre pedestales inalcanzables.

Este exceso de la vanidad, no solo limitaba el movimiento y la autonomía de las mujeres, sino que traía aparejados algunos singulares problemas. En Inglaterra se pasó una ley que permitía al esposo anular el matrimonio si descubría que su esposa lo había engañado disimulando su corta estatura valiéndose de chapines. Eventualmente, su uso fue prohibido en Venecia pues fueron causa de numerosos abortos debido a caídas.

Con la Revolución Francesa, los tacos fueron bajando debido a que éstos eran sinónimos de nobleza y opulencia y podían suscitar la ira del pueblo. Hasta mediados del 1800’s los zapatos de mujer fueron planos. Solo en días lluviosos las mujeres se servían de protectores metálicos que elevaban sus pies para proteger a sus finos calzados del barro y de la lluvia. Recién a fines del S. XIX se re introdujeron los tacos en los calzados femeninos. Durante todo el siglo XX los tacones volvieron a estar de moda variando en altura y estilo.

En épocas modernas, tal vez la principal evolución en el diseño del calzado sea la del taco aguja. Esta singular creación apareció en el panorama de la moda en 1952. Aunque no se sabe con certeza quien fue el primero en crear el diseño, se dice que Ferragamo, Albanese de Roma y Dal Có crearon "tacones de aguja" hacia 1953 en Italia, al mismo tiempo que Roger Vivier lanzaba su versión en París. La estructura de cada uno de ellos era la misma y bastante similar a la de un pequeño rascacielos de 10 centímetros, con un tubo delgado metálico dentro de un armazón de plástico alargado como soporte en forma de viga para sostener el peso de la mujer.

A pesar de su mala reputación, debido a consecuencias perjudiciales como torceduras o roturas de tobillo, a finales de los ‘50 los tacones de aguja eran los únicos zapatos que se ponía una mujer moderna, considerados como símbolos de agresión y de sexualidad elevada a la cumbre.

Es innegable que los zapatos de taco alto constituyen una de las principales paradojas de la moda moderna femenina. Todas las mujeres tenemos una relación amor/odio con ellos. Podemos aborrecerlos, sin embargo todas guardamos celosamente al menos un par en el ropero para usarlo en una ocasión especial. A pesar de las ampollas, las torceduras, y del hecho de que las mujeres siguen cayendo de ellos tan humillantemente como hace cientos de años, sabemos que los tacones son indiscutiblemente nuestra mejor arma a la hora de vernos elegantes y sentirnos irresistibles. Como decían nuestras abuelitas tan sabia y estoicamente, “para ser bellas hay que ver estrellas”.

ALIANZAS DE ESTILO

Es un hecho que, valga la redundancia, en el mundo de la moda las colaboraciones están de moda. Prestigiosas marcas y empresas están creando alianzas con diseñadores renombrados para lanzar productos en conjunto.

El interés de las empresas en las colaboraciones radica en los numerosos beneficios que las mismas generan. A través de ellas, las marcas se dirigen a sus clientes, intentando asociar determinados valores a un producto concreto o combinando varios productos de manera tal que el consumidor perciba su originalidad y exclusividad.

Por otro lado, las colaboraciones abren nuevos mercados donde las empresas pueden vender sus productos, pues cada marca gana acceso a la clientela de la otra marca. Para garantizar este intercambio, los productos llevan logos compartidos como por ejemplo “Stella Mc Cartney para Adidas” o “Karl Lagerfeld para H&M”.

En cada colaboración se fusionan estilos, experiencia e ideas logrando productos cargados de originalidad y practicidad. Se debe a esto el hecho que las colaboraciones estén invadiendo diversos ámbitos como el de la tecnología, la ropa deportiva, las compañías de ropa básica y hasta el de los juguetes.

MARCAS DE ROPA BÁSICA & DISEÑADORES

En los últimos tiempos, estas alianzas fueron las más comentadas. Las marcas desean alcanzar un aire más cool y renovado convocando a jóvenes diseñadores de moda, al mismo tiempo que los diseñadores aspiran ampliar su clientela y lograr mayor exposición. Tal es el caso de la colaboración en el 2001 de la trendy diseñadora neoyorquina Luella Bartley y la tienda inglesa de artículos de cuero Mulberry y su actual colaboración con la marca Target.

Otro incentivo para las alianzas de moda es el de atraer a un gran nombre de la moda que diseñe una colección que tenga tanto su nombre como su impronta para levantar el status de las ropas casuales. Así las mega-cadenas de prendas básicas pueden ofrecer a su clientela la posibilidad de acceder por pocos euros a diseños con una firma de lujo.

La popular compañía sueca H&M ha sabido explotar este aspecto, contratando en el 2005 a Karl Lagerfeld, el káiser de la moda elitista y director creativo de Chanel y Fendi, para crear 30 diseños de edición limitada que al ser lanzados en la tienda de Madrid se agotaron en el tiempo record de 15 minutos.

Lo absurdo de esto es que una colección que inicialmente fue ideada para llegar a todos, terminó en los roperos de estilistas, editores de moda y astutos especuladores que poco después de que la colección se agotara, estaban vendiendo las prendas en Internet al doble del precio original.

A pesar de la enorme popularidad de su línea para H&M, el anoréxico káiser rompió su alianza con la firma solo seis días después del lanzamiento de la colección, aludiendo que no le gustaba la manera en la que su colección fue comercializada; declarando al diario alemán Stern: “Diseñé ropa para gente delgada y esbelta. Esta era la idea original, y H&M ha hecho el talle hasta la 42!”.

Otra colaboración importante para H&M ha sido la de la diseñadora británica Stella Mc Cartney, contratada para diseñar 40 prendas de mujer para la temporada otoño invierno 2005-2006. La cual tuvo un suceso increíble, si se tiene en cuenta que la marca que lleva el nombre de la diseñadora, manejada por el grupo Gucci, está registrando pérdidas desde hace un par de años.

EL DISEÑO COMO DEPORTE EN EQUIPO

El sportswear ha sido el ramo donde más colaboraciones se han generado. Tal vez el punto inicial fue la alianza entre el diseñador japonés Yohji Yamamoto y Adidas, denominada “Y-3”. Las colecciones diseñadas por Yohji tuvieron un éxito inmediato de público y crítica y catapultaron las alianzas entre diseñadores y marcas deportivas.

La marca de alta moda Comme des Garçons ha sabido asociarse hábilmente a varias marcas deportivas como: Nike, Keds, y Speedo. Otra reciente alianza deportiva es la del francés Jean-Charles de Castelbajac con Le Coq Sportif,

En este ramo se produce un detalle curioso. No solo se han contratado diseñadores renombrados y consagrados, sino también se han reclutado a jóvenes promesas recién salidas de la escuela de diseño, además de diseñadores gráficos e industriales. Tal es el caso del joven Kim Jones, talento surgido del London Fashion Week, que acaba de presentar una colección diseñada para Umbro, denominada “Contrast” en la que contrasta el mundo del deporte con el de la moda. La experiencia en esta colaboración ha sido tan buena que Umbro ha reclutado al experimentado diseñador belga Dirk Bikkemberg para otro proyecto similar.

La marca alemana Puma que tiene la experiencia de haberse reinventado y reposicionado internacionalmente a fuerza de diseño, ha contratado a nada más y nada menos que el prolífico y multifacético diseñador industrial Phillipe Starck para diseñar una línea de calzados deportivos. Puma también ha unido a sus filas al joven diseñador británico Neil Barret y a la supermodelo Christy Turlington.

Pero probablemente, la colaboración más importante dentro del rubro es la de Stella McCartney & Adidas. La particularidad de esta colaboración es que no se trata de una edición limitada sino del desarrollo de líneas completas de ropa estrictamente deportiva. Su colección se orienta exclusivamente a la mujer, uniendo funcionalidad, belleza y tecnología. Su aporte más significativo ha sido la de incluir diseños orientados a deportes y actividades que la marca había dejado de lado, como el baile, el alpinismo, y los deportes invernales así como también ha incorporado una línea dedicada al Yoga y al Pilates.

TECNO-FASHION

La tecnología, siempre en constante renovación, es un rubro muy competitivo, por lo que ha recurrido en numerosas ocasiones a las colaboraciones para dar un valor agregado a sus productos. Lo último en tecnología ahora también debe ser exclusivo.

La marca danesa Bang & Olufsen, reconocida por la exclusividad de sus diseños y la tecnología de sus equipos audiovisuales, ha decidido estrechar lazos con Louis Vuitton, que ha creado dos elegantes accesorios de piel para “vestir” a BeoSound 2, un reproductor portátil de MP3. También ha diseñado una exclusiva cartera de piel para transportar a Serene, el teléfono móvil que la marca danesa a creado también en colaboración con Samsung.

Los I-Pod de Macintosh pueden “vestirse” con firmas como Gucci, Burberry, Comme des Garçons, Paul Smith o Dior. Lo curioso es que algunas de las fundas para I-Pod de estas marcas cuestan más que el I-Pod en sí.

Los celulares también están siguiendo esta tendencia, con fundas y accesorios creados por Swarovski o Viviente Westwood. Motorola ha dado un paso extra aliándose con Dolce & Galbana para crear el Motorota V3i, revestido en oro, tan exclusivo que se fabricarán solo 1000 unidades y que seguramente tendrá un precio tan elevado como la vanidad de quien lo compre.

Mercedes-Benz también presentó en el último Salón internacional del automóvil de París el exclusivo CLK 500 Cabrio firmado por el famoso diseñador italiano Giorgio Armani. A parte de esta serie exclusiva de solo 100 unidades, Mercedes-Benz tiene la experiencia previa de haber lanzado en colaboración con Swatch, el popularísimo vehículo híbrido ultra pequeño SMART, que ha sido un éxito rotundo en el mercado europeo debido a su bajo consumo y su pequeño tamaño que facilita su estacionamiento en las populosas ciudades europeas.
MODA LÚDICA

La archiconocida muñeca Barbie es toda una experta en colaboraciones. Su guardarropa entero ha sido diseñado por grandes casas de moda como: Anne Klein, Christian Dior, Donna Karan, Ralph Lauren, Versace, Bob Mackie, Calvin Klein, Giorgio Armani, Oscar de la Renta, entre otros. Hasta tiene unos deliciosos vestidos de novia en miniatura diseñados por la prestigiosísima Vera Wang.

A parte del mini vestuario couture, Barbie está colaborando desde hace varios años con la marca Benetton, lanzando modelos idénticos a ser usados por las niñas y por sus Barbies.

EL FUTURO DE LAS COLABORACIONES

Además de abrir nuevos mercados y generar jugosas ganancias las colaboraciones presentan la posibilidad de un interesante intercambio creativo generador de productos únicos e innovadores. Teniendo todo esto en cuenta podemos afirmar que seguiremos viendo muchas colaboraciones de diseño, tecnología y moda.

Tal vez el único inconveniente a éstas sería que el mercado en algún momento se sature. De todas maneras, a través del diseño y de la moda se seguirá generando un valor agregado capaz de convertir a un producto común en objeto de deseo.

jueves, 20 de noviembre de 2008

YO ME QUIERO CASAR… ¿Y UD?- NICOLETTA FIZZOTTI

“El mundo entero está sembrado de trampas,acechanzas y ardides para la captura de los hombres por las mujeres”
George Bernand Shaw



Mientras juego con mi alianza pienso con una sonrisa maquiavélica: “lo atrapé!” Y les puedo decir que no fue tarea fácil. Cada vez a las mujeres nos es más difícil llegar al altar con nuestras parejas. Parece que a la hora de dar el sí ambos corremos en direcciones contrarias. Nosotras, como desenfrenadas heroínas, corremos en cámara lenta con nuestras cabelleras al viento y sonrisas de desquiciadas por ese angosto pasillo como si fuera una meta de llegada. Ellos, como maratonistas etíopes, corren con zancadas atragantadas e indisimulable cara de pánico hacia la puerta de salida como si el techo de la iglesia estuviera a punto de desplomarse sobre ellos.


En el siglo XXI la gametofobia (o miedo al matrimonio) resuena cada vez con más fuerza. La sola palabra “esposa” tiene un sinónimo carcelario que me imagino ha de resultar muy poco atractivo para nuestros novios. Por supuesto, que el problema no es solo una cuestión semántica. La revolución femenina, la desintegración de la familia, el miedo al cambio, los traumas personales, la crisis de Peter Pan, son solo algunas de las posibles causas de este fenómeno. Lo cierto es que las mujeres de esta jungla a veces nos sentimos en un eterno safari en el cual la presa siempre esquiva y a la fuga es el hombre de nuestros sueños.



El hombre actual se ha vuelto tan escurridizo que en el intento de casarnos hemos terminado literalmente cazando a los hombres. Las mujeres hemos tenido que adoptar diversas técnicas para atrapar a nuestra presa y domesticarla para guiarla dócilmente camino al altar.


Si la última vez que le tocaste el tema “boda” a tu pareja solo te respondió una orquesta de grillos, es momento de que abras los ojos y te des cuenta -antes de que sea demasiado tarde- de que tu hombre le tiene miedo al compromiso y que seguirá encontrando excusas y pretextos hasta que te pongas tu equipo de exploradora camuflayado y le des un merecido descanso a tu maltrecha estatuita de San Antonio.

Recuerda que todos los humanos somos depredadores por naturaleza. No le tengas miedo a explorar tus instintos más atávicos y desarrollar todas las técnicas de cacería que te llevarán con éxito hacia la alfombra roja nupcial.

Una buena cazadora sabe que el señuelo es FUN-DA-MEN-TAL. En este caso el señuelo es la misma cazadora. El eje de su estrategia debe girar en torno a mantenerse siempre atractiva para la presa. No creas que lo lograrás solo con gym y lolas nuevas. Debes saber lo que le gusta a tu presa y también desenvolverte con actitud y seguridad en todas las circunstancias. Una mujer atractiva es siempre glamorosa, segura de sí misma y AS-TU-TA. Sobretodo lo último, pues sabe muy bien que quiere y como conseguirlo.

En el safari amoroso debes dominar los principios de la caza selectiva. Primero se van los trofeos, los que son extraídos por su edad avanzada (ej: el magnate petrolero octogenario). Luego les siguen los animales adultos, aquellos que aún tienen mucho por dar genéticamente y que son las presas preferidas por todas las cazadoras. Finalmente siguen los inmaduros. No subestimes a las presas más jóvenes, si te animas al desafío, te puede ir tan regio como a Demi.

En la caza hay que ser sigilosas y astutas, sobretodo a la hora de acechar a la presa. Existen dos técnicas fundamentales: el acecho y el rececho. Ambas son absolutamente válidas en nuestra selva tropical, siempre y cuando las utilices en el momento indicado y teniendo en cuenta las reglas de caza. El acecho es el arte de esperar oculta la llegada de la presa. El rececho es el arte de perseguir a la presa. Una cazadora experta sabe que puede usar ambas dentro de un mismo día de caza. Pero no te hagas la atolondrada. Recuerda que la presa no tiene ningún apuro, las apuradas somos nosotras. Debes controlarte al máximo y no abalanzarte sobre la primera presa que se te cruza (PA-TE-TI-CO) y menos aún hacerlo antes de tiempo. Nunca debes rematar a la presa si no estás segura de dar en el objetivo. Relájate, un disparo antes de tiempo arruina incontables horas de trabajo.

El acecho implica aguardar, por lo que es una modalidad que requiere de paciencia y habilidad a la hora de buscar e interpretar rastros. Si ya seleccionaste la presa, solo tenés que saber muy bien sus hábitos, estudiarla y saber siempre donde encontrarla. Para practicar el acecho, tenés que prestar mucha atención a los detalles y tener un sólido conocimiento de campo.

Una vez dominado el acecho se puede continuar con la técnica del rececho, que consiste en aproximarse sigilosamente a la presa para atraparla. En esta técnica una cazadora solitaria se alía con un guarda (que puede ser su amiga más íntima o su amigo gay de confianza) que supervisa la cacería para asegurar el éxito de la misma. Tu guarda te ayudará a obtener datos de las tendencias y pasiones de tu presa y su localización exacta. Si siguen a la presa hasta una disco, tu guarda es quien se acercará con absoluto sigilo para informarte todos sus movimientos de manera que puedas hacer tu entrada triunfal e inesperada en el momento oportuno. Una vez que la presa ha sido estudiada y detectada, podrás aproximarte con el viento a favor para efectuar el lance final.

Recuerda que en la cacería la tecnología puede ser tu mejor aliada. No la reniegues. Aprovecha los celulares con sus discretísimos mensajes de texto, cámaras y videos. ¿GPS? ¿Why not? Amigate con la tecnología hasta convertirte en una versión femenina de McGwyver para poder sacar el máximo provecho a todos los artilugios que el siglo XXI tiene para ofrecerte.

Ahora memoriza muy bien esto: los movimientos de la cazadora deben ser siempre sigilosos y nunca debes perder de vista a tu presa. La presa nunca debe sospechar de que le estás siguiendo el rastro y menos aún que lo tienes en la mira. A los hombres no les gusta sentirse perseguidos. Para esto debes ser la reina de la discreción, siempre detrás de un florero, hablando animadamente con otro chico, dejando toda la tarea de observación en manos de tu guarda. Si lo quieres admirar, recuerda de hacerlo siempre detrás de unas gafas oscuras y sin mover la cabeza. Detrás de ellas tus ojos deben estar medio viscos ya que la dirección de tu cabeza no debe delatar JAMAS la dirección de tu mirada.

En el momento que un hombre descubre nuestros ardides es el fin de la cacería. Si la primera vez que la presa duda al vernos no pasa nada (no te alteres y mantén la calma, recuerda de ser cool y no pierdas el glamour). Si te vuelves a descuidar será más difícil de retenerlo ya que lo más probable es que empiece a correr como gacela perseguida. Pero recuerda que NUNCA hay una tercera vez. “La tercera es la vencida” no se aplica en el terreno de caza, o sea que no dejes nunca que algo te delate. Recuerda: AS-TU-TA!

Si has fallado con las técnicas de acecho y rececho (en las cuales debes tener bien delimitado tu objetivo) no te desesperes. Siempre queda la caza de batida. Este tipo de cacería no es selectiva, lo único que importa es atrapar ALGO. Esta técnica es ideal para las mujeres agotadas que quieren cazar con el menor gasto de energía y tiempo. Para esto no se necesita sigilo, pero si tenacidad y descaro. Tímidas abstenerse. Para este tipo de cacería se requiere una partida de caza compuesta de mínimo 5 amigas solteras que imagino no les será nada difícil conseguir. Aquí lo que se quiere es salir en bandada y esparcir sus redes hasta que caiga una presa. Hay que acorralarla hasta que no le queden vías de escape. Los movimientos de la partida deben estar perfectamente coordinados en una coreografía precisa que llevará a la presa eventual directamente a la emboscada.

Algo que siempre tienes que tener en cuenta es que tu mejor táctica de cacería es hacerle creer a tu presa que el cazador es él. Recuerda los juegos mentales pre feministas de hacerse la dura. Esto garantizará que tu presa ilusamente se crea el cazador. Recuerda, como siempre: AS-TU-TA!

VUELTA ESTRELLA EN LA CABEZA: La Crisis de los 30 - Nicoletta Fizzotti


Cuando éramos chicos nos moríamos de ganas de tener un año más. Mi hija me dice con muchísima seguridad y orgullo que cuando tenga TRES (enfatizando mucho en la palabra tres) va a ser una nena grande y se va a poder ir al espacio. Me dijo que se va a subir a una nave espacial para explorar la luna (palabras textuales).

Los niños quieren crecer. Creen que los años están cargados de posibilidades. Para ellos todo es posible y es normal que a los TRES uno ya tenga edad suficiente como para escalar una montaña, aprender a volar, o viajar a la luna. Quieren ser grandes y por eso juegan a serlo.

De adolescentes esto cambia poco ya que nos damos cuenta de que a medida que crecemos aumentan los permisos y también nuestra libertad. A los 16 uno se siente adulto, o mejor dicho, un adulto incomprendido, porque nos sentimos más genios que Einstein y creemos que ya no tenemos nada más que aprender a pesar de que todos nos digan lo contrario!
A los 20 uno ya admite su edad con orgullo. Los 30 forman parte de un horizonte muy lejano al que seguro vamos a tardar siglos en llegar. No tenemos apuro, estamos en nuestro apogeo viviendo nuestras vidas libres, eufóricos, felices, nambréna. Imaginarse de 30 resulta imposible. Alguien de 30 ya es un abuelo! Se vive tranquilo, con la ingenua convicción de que para cuando se llegue a los 30 ya se va a tener la vida resuelta. TON-TOS!

Pero la realidad es que antes de darnos cuenta llegan esos ineludibles 30 años. Los años volaron, y lo más extraño es que no nos sentimos abuelos, nos sentimos apenas de 20 y todavía no tenemos nada resuelto. Empieza la frustración.

Como me dijo una amiga: “pero si yo creía que todavía podía hacer vuelta estrella!” Al ponerlo en práctica se dio cuenta de que si bien podía hacerlo perfectamente en un plano mental, el engendro de vuelta estrella que logró hacer la dejó con un fuerte dolor de espalda, y un orgullo profundamente herido.

Esta vuelta estrella que nos sale tan bien en nuestras cabezas es uno de los momentos más traumáticos y significativos de la crisis de los treinta.

Resulta que antes de los treinta, tenemos asumido que podemos hacer vuelta estrella. Es un hecho. Sabemos que hacer una vuelta estrella es la cosa más fácil del mundo. Y si podemos hacerlo en la cabeza podemos hacerlo en cualquier lado. Tenemos la seguridad de poder hacerla con la gracia de Nadia Comanechi, y si nos sobra el tiempo para pichear hasta con saludito gimnástico incluido.


Después de los 30 uno empieza a dudar de sus habilidades. Empiezan las vocecitas internas cargadas de incertidumbre: “será que me sale todavía?” El hecho pasó a ser una duda con altas probabilidades de fracaso.

Tras constatar penosamente de que a mí también la vuelta estrella solo me salía en la cabeza. Con mi orgullo tremendamente herido y cargada de pensamientos perturbadores y apocalípticos confesé a mis amigas que al hacerla me quedé con el cuello duro.

“Hola, soy Nicoletta, y ya no puedo hacer vuelta estrella.” Una confesión terrible y desgarradora que cayó como una bomba en mi círculo más próximo. Los resultados de mi confesión fueron calamitosos. Mis amigas fueron llamándome una a una para contarme sus experiencias. Hasta mi amiga que había estudiado y practicado gimnasia olímpica (y no era una vulgar empírica de recreo como el resto de nosotras) quedó con los pantalones rotos.

La vuelta estrella que todas podíamos hacer en nuestras cabezas con gracia y agilidad de gacela se materializaba en unas contorciones toscas y dificultosas, más propias de una marmota que de las ágiles mujeres que todas somos (mentalmente).

A partir de este momento crítico de nuestras vidas surge primero un sentimiento de congoja. La vejez nos muestra por primera vez su poco agraciado rostro. Vienen los pataleos, los mambos, los gritos en el medio de la noche. Luego del desahogo llega la paz y con ella la aceptación. Los treinta han llegado. No podemos huir del tiempo. Por más de que entrenemos un mes para lograr la vuelta estrella perfecta de nuestros recuerdos, ya se ha perdido la espontaneidad y la seguridad de la juventud.

Por lo tanto, a partir de los 30, asumimos que la vejez nos tiene sentenciados. Abrazamos nuestro destino. Pero no nos resignamos. Ahora sobreviene el momento más significativo, aquel que marcará la cantidad de velas en nuestras futuras tortas. Tras las doscientas veinte noches sin dormir, pensando en que ya no podemos hacer vuelta estrella salvo en el perfecto mundo de las ideas, angustiados frente a los 30 que nos acechan, mambeándonos incesantemente hasta adormecernos nos percatamos de que solo nos quedan dos opciones:

A. ROBARSE LOS AÑOS: esto no es ningún robo. Es un derecho. Le da sabora la vida. Acaba con la frustración. Uno incluso puede llegar al fantástico prozac del auto engaño..... imagínense yendo por la vida con 10 años menos. A los 30 se cumple 20, y a los 40 se cumple 30 y a los 50 se cumple 40. Un detalle a tener en cuenta es que esta opción es solo para espléndidos y espléndidas. Si los años no fueron generosos con tu persona, ni sueñes con robarte ni siquiera un minuto de vida porque no vas a lograr el efecto deseado. Para quesea efectivo, lo único que puede llegar a delatarte es tu Cédula de Identidad, que por supuesto está eternamente perdida y por eso solo andás conla denuncia policial de su extravío en la cartera... argumentando que no la renovás porque no hay insumos.

B. AGREGARSE AÑOS: Esta es la opción para los no tan espléndidos quejuega astutamente con los preconceptos relacionados con la edad. Si ya se te nota una arruguita (que en realidad no son arrugas sino "signos de expresión" porque somos tan expresivos) y la piel te empieza a colgary a sobrar aunque sea apeniiiiitas... (recuerden que están autoengañados) lo ideal es sumarse un par de años (no abusen que un viejo es siempre un viejo... no vayan a sumarse 10 o 15 porque están fritos) No cumplan 30, cumplan 34. Y ahívan a llover las hermosas palabras: PERO SI NO PARECÉS MÁS DE 25!!! Esta esla única alternativa para que los no tan espléndidos terminen siéndolo... porque no hay nada más regio que envejecer con gracia.

O sea que ya lo saben, entre nosotros, para los que la vuelta estrella es una utopía, hay muchos que probablemente nunca lleguen ni cerca de los 30, al menos no en esta década y otros tantos que los saltearán para ir directo a los 35.

En mí caso en particular, por más de que la vuelta estrella no me sale como me la imagino, no me resigno. En mi cabeza la repetiré hasta la inconciencia. Como dice siempre mi abuelo de cien años, a la vejez: viruela.

TIPS PARA SOBREVIVIR AL DIA DE LOS ENAMORADOS – Nicoletta Fizzotti


Hay que admitirlo, el día de los enamorados solamente lo disfrutan los novios. Para las solteras y para las casadas es una catástrofe. Para las primeras, este día implica un recordatorio constante de la ausencia de su media naranja y para las segundas, es un revelador inclemente de la letal pérdida de romanticismo de su peor es nada. A continuación les doy 10 tips paraa mis amigas solteras, para que puedan sacarle el jugo al día de los enamorados!


10 TIPS PARA SOLTERAS
1. Recuerda que no eres la única soltera que tiene que sobrevivir a este día. Tómatelo a la ligera y empieza el día enviando una tarjeta virtual anti-valentine (www.meish.org/vd) a todas tus amigas solteras. Así todas podrán empezar, igual que vos, el día con una sonrisa.


2. Si decides probar suerte y salir en búsqueda de algún solterito, evita absolutamente los restaurantes, pubs, lounges, etc. Mientras más íntimo el ambiente, peor será la situación. No querrás encontrarte sola entre miles de parejitas con ojos de tortolitos regalándose rosas y miradas melosas.
3. Si eres de las que disfrutan su soltería. Pasa el día mimándote y anótate a un día entero de tratamientos en un spa.

4. Calcula cuanto hubieras gastado si tuvieras un novio a quien regalarle algo en este día y gástalo TODO en VOS!!!

5. Si eres de las que no toleran estar solas este día, usa tu ingenio. Unos días antes agenda una cita con algún chico (puede ser alguien que te guste, algún ex en buenos términos o simplemente un chico que te gustaría conocer). No seas tonta y evita mencionarle que es el día de los enamorados. Simplemente invítalo a hacer algo el jueves por la noche. Como buen hombre, seguro que es distraído y jamás se va a dar cuenta de que justo el jueves es el día de los enamorados! Esta noche no se te va a poder escapar!

6. Si te fallaron todas las artimañas para salir con alguien el día de los enamorados y detestas la idea de salir sola con tus amigas mujeres. Invita a cenar a tu mejor amigo gay. Todos te verán acompañada por un hombre y vos te vas a pasar la noche riéndote de sus comentarios ingeniosos sobre la cara de idiotas de las demás parejitas del restaurante!

7. Si todo el arsenal de cupido falló y no tienes quien te regale una caja de bombones, no te quedes con las ganas y regálatelos vos misma. Cómprate una caja inmensa de los más deliciosos bombones artesanales y ten presente que el chocolate es el mejor substituto del sexo!

8. Si tu mayor preocupación en este día es ser la única sin un ramo de flores en la oficina. No seas tonta y envíatelo a vos misma! Asegúrate de elegir el ramo más grande y caro de todos y de incluir una tarjeta con un poema fabulosamente romántico firmada solo con unas iniciales misteriosas. Te garantizo que esto te revertirá tu situación de ser la más patética y abandonada a la más envidiada de la ofi

9. Seguro que tienes miles de amigas y amigos solteros. La unión hace la fuerza! El 14 de febrero es la noche ideal para organizar una divertida fiesta solo para solteros. Invita a tus amigos, a los amigos de tus amigos, a los amigos de los amigos de tus amigos. Quien sabe, esta noche podría aparecer tu tan anhelado Romeo, y si no, al menos te divertirás con tus amigas.

10. Repite todo el día esta palabra: DIGNIDAD y mantén tu cabeza bien erguida ya que en el fondo sabes que el único bombón de esta fecha sos VOS y que no necesitas ningún orangután que te lo recuerde.

Tendencias de Moda Para un Invierno Simulado – Nicoletta Fizzotti


Paraguay es un país de eterno verano, donde el más crudo invierno se resume en tres o cuatro días de fresco a mediados de julio. Las paraguayas por lo tanto, sufrimos todas de una especie de alucinación colectiva que nos hace empezar a tiritar ni bien el termómetro empieza a marcar por debajo de los 30ºC. Debajo de los 20ºC ya equivale a -1º europeo.

Cuando este curioso fenómeno inicia, todas nos volvemos locas. Nos apresuramos a sacar las pieles del frigorífico y abrimos frenéticamente los baúles o valijas de ropa de invierno para sacar nuestras prendas de abrigo. Tenemos que ser rápidas, no podemos dejar pasar un solo minuto; esperar un par de días puede constituir un error fatal. Como el fresco es tan fugaz, el invierno podría acabarse antes de que terminemos de airear nuestros accesorios invernales.

Tras constatar que el olor a naftalina no va a salir a tiempo, y que nuestro último sweater esta hiper archi recontra pasado de moda (pues lo compramos en la última “helada” hace cinco años) corremos al Shopping desesperadas para buscar el cálido abrigo que solo el cashmere y el terciopelo nos pueden brindar.

Lo curioso es que las boutiques asuncenas están tan bien equipadas para el invierno como cualquier tienda de Aspen o Reykiavik. Y todo es tan lindo! ¡Como resistirse a ese abrigo de visón que seguramente pasará el resto de nuestras vidas en la congeladora para que no se estropee! ¡Como negarnos el deleite de usar ese adorable sweater de lana que viene con guantes, sombrero y bufanda a juego!

A esta altura, la alucinación colectiva es imparable. El invierno ha llegado y está haciendo MUCHISIMO frío y ni el sol y el calor pueden quitarnos esta fijación que durará hasta mediados de agosto. Como la temperatura no da, nuestro cuerpo de compradoras compulsivas empieza a sufrir un cambio psicofísico. Nuestro termostato interior ya ha empezado a marcar bajo cero.

Esta es una guía práctica de las tendencias para la temporada Otoño-Invierno 2007, para que todas se preparen psicológicamente y luzcan regias en sus inviernos simulados.

LEOPARDO
Ya se que Susana Giménez es tu ídola, pero hay que dejar asentado que su debilidad por el leopardo es un tanto extrema. No te hagas la diva, que lo que a Su se le perdona a vos solo te engroncha. NO EXAGERES. Te lo repito de nuevo para que lo retengas: NO EXAGERES!! Para lograr el look felino, accesorios como zapatos, foulards y carteras son ideales. Ten mucho cuidado y recuerda por la enésima vez NO EXAGERES. Ya sé que como paraguaya y fan de Su sos propensa a los excesos, pero nada de andar de leopardo de pies a cabezas que solo vas a lograr parecer un jaguareté exageradamente confundido.

JUMPERS
Nada nos recuerda más a nuestros años de escueleras que estas infantiles prendas. Para evitar generar la suposición de que tuviste una regresión que te hizo sacar del baulito de tus recuerdos tu viejo uniforme escolar, optá por géneros sofisticados como el terciopelo o el brocato y combinálos con botas hiper adherentes o delicados zapatos de raso.

TERCIOPELO

El terciopelo es un tejido que puede agregar glamour instantáneo a tu look invernal. Hay una rica variedad de tonos para elegir: verde, chocolate, bordeaux, azúl marino y violeta. Un must: el vestidito negro de terciopelo para noches sofisticadas.

PIELES

A pesar de que por nuestras latitudes las ocasiones de usarlas son tan limitadas, un abrigo de piel es el sueño de toda paraguaya. Y atiendan que estamos hablando de abrigos de piel y no de mamarrachos. Que ni te rocen los conejotes, que para el criterio de muchas entendidas en pieles están solo un grado más arriba que una comadreja y quien en su sano juicio quiere un abrigo de un pariente cercano de la comadreja? Que no te vendan zircón por diamante! Deléitate con el visón de tus sueños. Consiéntete con un armiño digno de la realeza. Este es el momento en que tu marido te agradezca dignamente por los 5 hermosos hijos que le diste y por tus 10 años de venir bancando su constante piré vaí. No te rindas! Yo sé que sabés hacerte escuchar. Plagueá tu camino hasta la victoria. Podrido de escucharte, te consentirá con el amigo peludito de tus sueños. Por más que tengas que poner el aire acondicionado a mil para darte el gusto de envolverte en tu nuevo trofeo, estoy segura de que éste hará relucir tu reina interior!

PANTALONES ANCHOS
Esta es una tendencia soñada para las mujeres de medidas más que reales. En estos pantalones hay lugar de sobra para albergar y abrigar a todos nuestros excesos. No hay nada más elegante que un pantalón bien ancho de corte masculino acompañado de perlas y una camisa de seda. Un clásico de los años cuarenta que puede dejar sofisticada hasta a la menos agraciada de nosotras.

CAPAS Y PONCHOS
Cuidado con estos accesorios. Las capas tienen que ser bien cortitas. Deben llegar justo a la cintura. Elegir una capa demasiado larga te puede hacer parecer la hija del zorro, o en el peor de los casos, su madre. Si elegís un material liviano como jersey, hilo o incluso alguna lana ligerita podés sacarle el jugo a esta prenda ya que es ideal para nuestro pseudo invierno. En cuanto a los ponchos, recordá que la consigna es que la prenda tenga reminiscencias de un poncho. No vayas a ponerte el poncho multicolor que trajiste de Guatemala o peor aún, aquél que tiene diseños de llamas en la trama, porque las cholitas nunca han estado de moda.

VOLUMEN
La silueta voluminosa de esta temporada propone diversas y divertidas alternativas. Siguen las faldas globos y las mangas abullonadas y se incorporan abrigos armados y sweaters tejidos extra grandes, así como pantalones y faldas largas y holgadas.
Maxi sweaters: Para que nadie crea que le robaste el sweater a tu abuelito usalo abierto y sobreponé un cinto bien ancho y de cintura.
Maxi faldas:. Las faldas este invierno vienen al más puro estilo reggaeton: hasta abajo! Sacale lustre al piso con tus faldas. Para lograr una silueta más estilizada, tu top debe ser del mismo color que tu falda.
Abrigos voluminosos: Este es el momento apropiado para indagar en el baúl de la abuela. Los abrigos armados de mangas amplias y botones grandes tan característicos de los años 60 están regreso. En cuanto a los tonos tenés un sinfín de opciones. Todos los colores son válidos y si tienen estampados o bordados mejor! Si lográs un buen hallazgo vintage te garantizo que reinarás entre tus amigas.



Como llevar las Nuevas Tendencias de Moda – Nicoletta Fizzotti


Las mujeres muchas veces nos sentimos victimas de un cruel complot tramado por mentes siniestras que se reúnen en un lugar secreto para decidir lo que ellos llaman "tendencias de moda". Cada temporada un nuevo dolor de cabeza, ¿no?

Quienes son y como lo hacen es un misterio. Tal vez llega John Galliano y dice: - "Veo, veo…. veo motas!” Y exclaman a dúo Dolce & Gabanna aplaudiendo al borde del éxtasis:- "Si, Si! Tengo una visión: faldas globos a motas!!!”. Y ese año llevamos más motas que un enfermo de sarampión; y si no nos gustan, tendremos que aprender a vivir con ellas, pues nuestra opinión es la única que las mentes perversas no tienen en cuenta.

Solo nos queda aprender a vivir con el enemigo, y para hacerlo con éxito, hay que seguir las directrices de Sun Tzu y tener en cuenta que el arte de la guerra se basa en el engaño.

A pesar de que esta temporada las nuevas tendencias anuncian jaquecas crónicas para muchas, existen soluciones para cada uno de los problemas que puedan surgir y muchas estrategias para emprender con victoria la marcha hacia un verano glamoroso.

PLISADOS
El problema: ¿Cómo usarlos sin doblar el tamaño de nuestra figura?
El engaño: Los plisados son un arma de doble filo. Mal puestos, pueden dejarnos como farolitos chinos, pero si los usamos estratégicamente, pasamos de farolitos a estilizadas estatuas griegas. La clave está en las proporciones. Si nuestra parte superior es ancha, podemos balancearla valiéndonos de una falda plisada y viceversa.

PANTALONES Y FALDAS DE CINTURA
El problema: ¿Les suena la película “La Revancha de los Nerds”? Las prendas de cintura pueden hacernos ver como actrices extras de este film.
El engaño: La respuesta está en el top. Piensen en Sofía Loren y en sus sensuales camisas ajustadas, éstas van de maravilla con las faldas de cintura. Para los pantalones o jeans de cinturas podemos valernos de camisas de plumetí metidas adentro o ceñidas con las fajas de cuero que están tan de moda.

COLORES VIBRANTES
El problema: ¿Cómo evitar vernos chillonas con los vibrantes colores de esta temporada?
El engaño: Los colores ayudan a levantar el ánimo y nos hacen sobresalir en una multitud. Con los colores correctos se pueden iluminar y resaltar el rostro. Pero ojo, no hay tendencia que valga, si el color no va con nuestra piel. Nunca se arriesguen a un color cuyo efecto no se haya probado de antemano. Una estrategia para acostumbrarse y testar la viabilidad de un nuevo color es probando primero con un detalle (lo ideal sería con un collar o un foulard).

TALLE IMPERIO
El problema: Esa mano atrevida que te frota la panza con simulada ternura preguntándote con falso entusiasmo: “De cuanto estás?!”
El engaño: Hay que resaltar que este corte es ideal para las que tienen figura de pera, pues los pliegues pueden camuflayar imperfecciones en la zona de vientre y caderas; sin embargo, un exceso de volumen puede producir que el look imperio se convierta en un look pre-mamá. Sobreponiendo un bolero entallado, chaleco o campera corta se controla el volumen y se crea una mejor figura. Un collar de cuentas bien largo puede también convertirse en un arma válida para dominar al imperio, pues ayuda a alargar el cuello y evita que la prenda flote demasiado.

CALZAS ANGOSTAS Y PANTALONES CIGARETTE
El problema: Los caños angostos en los pantalones así como las calzas ajustadas constituyen el enemigo número uno de las caderonas tan frecuentes en nuestras latitudes.
El engaño: Por algo Audrey Hepburn las amaba. Estas prendas dan curvas hasta a las que no las tienen, resaltando con flúor y purpurina a las caderas, por lo que conviene usarlas con cuidado. Si tus medidas son más que voluptuosas es mejor que directamente te abstengas, pues con este corte, no te ayuda ni el negro. Si tus caderas son pronunciadas pero aún califican como sexies, puedes atreverte con precaución, usando solo colores oscuros y sobreponiendo vestidos o caftanes, teniendo siempre en cuenta que el borde del vestido debe llegar a la parte más fina de tus piernas. Un buen par zapatos con tacos altos y plataformas puede darte esa ayudita extra para zafar con este look.

PLATAFORMAS
El problema: Este problema es solo una cuestión de estética: ¿Cómo acostumbrarse a estos zapatones después de las estilizadas líneas anteriores.
El engaño: Si bien los zapatos de punta fina son los mejores para ayudar a estilizar las piernas, las plataformas pueden hacer milagros a la hora de generar ilusiones ópticas beneficiosas. Con ellas no solo ganamos unos centímetros demás, sino también creamos la ilusión de piernas más largas y consecuentemente más finas. Las plataformas van bien con todo tipo de faldas y pantalones.

BOLEROS
El problema: Esta temporada presenta dos propuestas totalmente incompatibles: los pantalones de cintura y los boleros. Ambas son válidas por separado pero usarlas juntas solo pueden llevar al trágico error de parecer un torero.
El engaño: Los boleros quedan bien con tops de corte imperio pues ayudan a controlar el volumen de estas prendas tan sueltas y etéreas y dar contorno a la silueta. También son ideales para usar con vestidos (son el substituto ideal para la ya demodé pashmina).

CINTOS
El problema: En esta temporada, en la que tanto la silueta imperio como la de cintura son opciones válidas, se genera un poco de desorientación a la hora de ubicar a estos cinturones anchos tan de moda. ¿A qué altura hay que ponerse el cinto?
El engaño: los cinturones son ideales para controlar el volumen de camisas de corte imperio. Con las prendas que siguen la línea imperio, pueden usarse justo debajo del busto o en las caderas. La regla es sencilla: mientras más bajo el cinto, más casual el look. Los cinturones anchos también van de maravilla con faldas y pantalones de cintura. Pueden sobreponer a un pañuelo atado en la cintura o faja en tela, un cinto bien fino para lograr un look bien sofisticado.

BLANCO
El problema: El blanco es el color del verano y uno de los colores que más energía positiva atrae (por algo es el elegido de los que practican yoga) pero es también uno de los más difíciles de llevar. Hay que tener mucho cuidado para no parecer un queso o una enfermera o estudiante de odontología.
El engaño: Para evitar la comparación con un producto lácteo la mejor solución es el bronceado. Para evitar cualquier semejanza a un profesional o auxiliar médico, preferir telas con texturas, vainillas y encajes ligeros. Otra estrategia a la hora de llevar el color de la temporada con soltura es la de romper el mono color con un detalle o accesorio de color negro o rojo.

ENCAJES Y TEJIDOS ETÉREOS
El problema: La línea entre ser una musa etérea o una chabacana cabaretera se convierte en una muy delgada si no conocemos las reglas del juego.
El engaño: Elegir encajes en colores neutros (blanco, crema, negro). El encaje rojo está absolutamente prohibido. Solo imagínense una blusa roja corte imperio en gasa y con detalles en encaje al tono, nada más parecido a un baby doll reciclado. Toda tendencia que deja ver la ropa interior debe ser usada con cautela y solo logran llevarla con glamour y soltura las poseedoras de un gran sentido de la ubicación y de un gusto impecable. Estas prendas solo deben ser usadas con la ropa interior adecuada (una camiseta o visillo color piel o blanco). También se puede sobreponer a estos géneros boleros o camperas entalladas. Recuerden siempre que si exponemos demasiada piel corremos un alto riesgo de ser consideradas chabacanas.

SHORTS
El problema: Una pregunta que surge en todas las mujeres mayores de 30 años en esta temporada es si existe una manera adulta de usar shorts.
El engaño: La clave está en usar telas exquisitas como el lino o el algodón fino. Cuando las piernas no dan para los shorts se puede optar por los bermudas o pescadores. Hay que usarlos siempre con tacos o plataformas para alargar las piernas. Bajo ninguna circunstancia deben ser usados con zapatillas deportivas. Las ballerinas son una opción perfecta para usar con estas prendas, pero solo pueden hacer esta combinación aquellas con piernas impecables.

HARTAS DE NOVELAS Y CUENTOS DE HADAS – Nicoletta Fizzotti

Nosotras, las paraguayas, somos el producto de un cóctel barato de Dinastía y Quinceañera. Lo que vale la pena aclarar es que no me refiero a un cóctel que se ingiera....sino a un autentico cóctel molotov mega explosivo al más puro estilo terrorista sentimental. Creo que por esta mezcla de ingredientes subtropicales (calor, humedad, viento norte, viento sur y fauna exótica) todas estamos sentenciadas a vivir nuestro propio culebrón personal. Estoy segura de que todas las mujeres paraguayas tenemos un rosario de anécdotas sentimentales, capaces de engendrar al nuevo hit televisivo de la siesta latinoamericana: la telenovela del año que será traducida a 20 idiomas y contará con doblaje hasta en suahili y por supuesto su versión yanqui con Salma Hayek o J-LO como protagonista.

Este cóctel explosivo nos ha convertido en una generación de tele noveleras... divas subtropicales del melodrama....histéricas, neurasténicas y capaces de transformarnos en un nano segundo de divinas protagonistas a la más cruel villana enfurecida. En síntesis: nosotras, producto de años de telenovelas sobre actuadas, de besuqueos de Barbies y Kens, y lecturas de novelas rosadas.... estúpidas, ingenuas, en eterna búsqueda del príncipe no tan azul que venga a recoger nuestro zapatito de cristal. Somos las eternas ilusas.... las incansables creyentes del final del cuento de hadas... y vivieron felices para siempre???? HELLOOOOO DEJA EL CHOW HANS CHRISTIAN ANDERSON!!!!

Lo más probable es que la E -TRUE HOLLYWOOD STORY de los cuentos de hada termine en los siguientes supuestos ideados por un sabio y ocurrente amigo mío:

Cuentos de Hadas….Porque seguimos creyendo?
"Vayamos al grano…Quien demonios se traga el final del cuento? Nadie se molesto en contarnos que paso luego del “…y vivieron felices para siempre”.
Nadie nos dijo en realidad que Blanca Nieves a los dos meses de casada se encontró al principillo en la cama con los siete enanos (y bien sabemos la fama que tienen lo enanos). Se divorcio, le saco la mitad de la capa azul, vendió medio palacio y ahora anda de disco en disco tomando apple martinis
Tampoco nos contaron que la bella durmiente termino ganándose la vida como bailarina exótica luego de que el vivísimo y lustroso príncipe le robo la herencia de su noble padre, los títulos del palacio y dos conjuntos de ropa interior by “La Perla” que se los regalo a su nueva amante (una india negruzca de anchas fosas nasales que fregaba la taberna local).
Nadie nos dijo que Cenicienta tuvo que huir despavorida porque la verdadera pasión del azulísimo príncipe no era recoger zapatos sino arrojarlos contra su esposa, quien cansada de estar más azul que su príncipe decidió rajarse a Milán, ingresar a la universidad y acabar sus días diseñando zapatos para Gucci…
Tampoco nos contaron que Ken era taaaaaaaan rasca que la pobre Barbie termino vendiendo su closet entero para poder depilarse todos los meses y seguir siendo rubia…
Nadie nos contó que la alguna vez esplendida Rapunzel anda en un auto familiar con 5 vástagos que no la dejan en paz, con 45 kg de más, luchando contra la celulitis y con un carré que apenas puede cuidar mientras choferea a los demonios que parió del tenis a la profesora particular… "

(Extracto del “Shegua Must Read de la semana” de Carlos Burró)

Todas hemos comprobado que:

- En primer instancia: por más de que nos lo merecemos infinitamente, NO somos princesas. Solo lo es la detestable Letizia con zeta y la odiosa Máxima a la que en realidad no le envidio el príncipe. Acá entramos en otro tema: LOS PRINCIPES NO SON LO QUE DEBERÍAN SER; son patéticos poster boys del efecto de años de endogamia. Como lo que no se dan cuenta de que para mejorar verdaderamente su sangre tienen que venir a buscar "para su princesa" en el corazón de América!!! ACÁ hay MILES de mujeres TOTALMENTE capacitadas para la vida de Princesa pues hemos hecho el curso intensivo que duró toda nuestra infancia (con las lecturas infantiles) y toda nuestra adolescencia (con las telenovelas mexicanas y las ávidas lecturas de Hola en las peluquerías). Todas somos PRINCESAS EN POTENCIA!!! Como diamantes en bruto que esperan su pulido, como estrellas a punto de ser descubiertas. Chicas no se den por vencidas!!!! Acicálense cada vez que venga el príncipe de Asturias a hacer su recorrido y sigan soñando que es gratis y la esperanza es lo único que no se pierde....


- También hemos comprobado que en toda historia HAY UNA BRUJA -que por supuesto no somos nosotras- y que generalmente es una ex novia rencorosa, una madre insoportable, una madrastra insufrible o una serruchadora compulsiva que tiene todo más fríamente calculado que el Chapulín Colorado. Pero lo triste es que ya sabemos que al matar una bruja viene otra y otra y otra. Muchas veces esta bruja vive en nuestras cabezas años después de haber contaminado con su manzanita envenenada a nuestras vidas..... es una onda Freddy Krugger que se te aparece en sueños como Póra y su fantasmita siempre anda transitando los lugares oscuros de nuestra mente, resucitada por la más leve remembranza al ácido sabor de su veneno...para amargar el mejor de tus momentos con el mambo negro de su recuerdo. Pero recuerden algo: todas las villanas tele noveleras fueron dulces protagonistas en algún momento de sus carreras (generalmente antes de envejecer) Por lo que creo que a partir de los 30 nos sienta mejor este papel. Es hora de ser un poco brujas y darle mordiscos a la vida, ladrar, armar barullo y que nos importe un bledo el que dirán....porque definitivamente nadie se divierte más que la villana!!!! Ella solo tiene que ser mala pues, no tiene que agradar a nadie, ni simular respeto, ni siquiera tiene que refrenar su instinto asesino a la hora de proporcionar un merecido sopapo. CHICAS AFILEN SUS UÑICAS MANICUREADAS Y SAQUEN LA VILLANA QUE HAY EN UDS!!!!! Basta de ser la eterna víctima de las telenovelas... eso solo funciona si se te aparece un auténtico príncipe azul, y no los sapos que tanto abundan en nuestras latitudes. Acordáte que si seguís esperándolo, lo más probable es que termines contándole tu historia entre lágrimas a la señorita Laura frente a la sonrisa irónica del DESGRACIADO. Por lo tanto: levantate-te-te-salte del closet!!!!

- Lo que tuvimos que aprender en muchos casos a la fuerza es que en la vida, besamos muchos príncipes que se convierten en sapos y otra tanda de sapos con la esperanza de que se conviertan en príncipes. Por supuesto esto es parte del MITO. Es más probable que tu chongo se convierta en Luisón una noche de luna llena que encontrar un sapo que se convierta en príncipe. Sapo es sapo y punto. Ni todo tu buen gusto, ni pulido con micro dermo abrasión y láser dirigido, y menos aún TOOOODA tu buena voluntad van a lograr que ese tierno sapito que adoptaste por INGENUA se convierta algún día en Príncipe. Lo podés disfrazar, ponerle coronita y todo, pero irremediablemente algún día largará su eructo. BURP con un juruné satánico que al fin logrará hacerte huir despavorida de la hermosa burbujita en la que estabas tan feliz. Por lo tanto repitan y memoricen: SAPO VESTIDO DE SEDA SAPO QUEDA!


- La historia no se acaba con el popular "se casaron y vivieron felices para siempre". NAHANIRI!!! Creo que esto solo pasa si tenés mucha mucha mucha suerte o MUCHOS MUCHOS hijos.... porque ya todas tenemos claro que nada dura para siempre, ni siquiera las malas telenovelas por más de que tengan 1150 capítulos y parezcan eternas, teniéndote al filo de la desesperación en cada episodio, con sus sopapos y sus tiradas de mechones blondos farmacéuticos y agarradas de flecos batidos, TAMBIEN tienen un final. Después empieza la misma historia, con la misma protagonista, otro galán y solo un leve cambio de escenario y x supuesto de nombre. Así la romántica Jade del Clon se corta y se plancha sus larga melena morena, se hecha un frasco entero de agua oxigenada, y se vuelve súper villana para interpretar a la malísima blonda de Lazos de Familia. Y la historia es siempre la misma: de Rosa Salvaje, pasando por Topacio y Cristal hasta Hija del Jardinero (juro por Dios que así se llama una novela) todas cuentan la historia de una chirusa que tras vencer todos los obstáculos económicos, sociales, ficticios y reales, tras agarrarse a tongos mil veces con la bruja malvada (la mejor sin duda Alexis Carrington y en nuestras latitudes la inmejorable villana Lupita Ferrer... la reina absoluta de las villanas ochentosas) y descubrir que era la hija natural del magnate petrolero y media hermana del chongo de la semana, da un giro radical para ser legalmente reconocida x su padre, tomar las riendas del imperio, mandar a la villana al manicomio o tirarla del piso 86, y rehacer su vida al lado de un nuevo chongo reciclado. Porque todas sabemos muy bien QUE HAY QUE RECICLAR!!! Y sobre todo en nuestras latitudes donde hay tanta sobrepoblación de orangutanes!!! Al menos si nuestras telenovelas no terminan tan bien como esperamos, todas sabemos que tenemos una segunda oportunidad.... y una tercera.... y hasta una cuarta si se nos antoja!!!

Por lo tanto, en el día de los enamorados, DECRETO:

1. DÍA INTERNACIONAL DE LAS ARISTOCRÁTICAS DE LOS YUYALES Y DE LAS PRINCESAS RUSTICAS DE REALEZA GUARANÍ Aunque solo podamos reinar en nuestras casas ostentando el título de Su Alteza Real de los Shushales, TODAS, nos merecemos trato de princesa!!! Nada de conformarse con menos!!! El 14 de febrero queda decretado como el día oficial para que ELLOS nos traten como tales. SI SE TE HACE EL ORANGUTAN Y TE PIDE QUE LE PASES LA CERVEZA, SACA LA VILLANA QUE HAY EN VOS y se la pasas....... derramándosela sobre la cabeza oooobvio!!! No te olvides de mantener siempre compuesta la sonrisa de miss, que todas las protagonistas transformadas en villanas también fueron mises en algún momento de sus carreras.

2. EXTERMINIO RADICAL DE BRUJAS, ESPECTROS Y DEMÁS CHIRUSAS Y MALANDRINAS. El destino de las brujas es solo uno: LA HOGUERA. Afilá tu picota y nuevamente sacá la villana que hay en vos, dale lustre a tu Lupita Ferrer, y NO BAJES MÁS LA MIRADA. Es hora de enfrentar el lado oscuro!!! Y que nadie me venga con la idiotez esa de dar la otra mejilla.... A DEVOLVER EL SOPAPO SE HA DICHO!!! Que tenemos material de sobra como para escribir un libro con la cantidad de sopapos que quisimos dar en nuestras vidas y nos contuvimos. Que vuelen esos mechones batidos!!! Que le salga la baba como Rocky IV! Usá todo lo aprendido en tu clase de Kick Boxing y sacale el polvo a la mugrosa arrebatadora. Si te agreden con palabras necias.... nada de oídos sordos.... ahí mismo le bajás un SHUT UP manual de un izquierdazo. Y si se hace la belicosa, y te dice que te va a demandar, le rematas con un derechazo en la boca para aflojarle bien los dientes (tan flojos como su lengua) ya que si te va a demandar más vale que te descargues bien luego porque la demanda y la pena son la misma tanto por 1 bife como por 2. Por supuesto nada de hacerse la asustadiza.... le decís en el acto: PERFECTO... Si tenés algún problema le llamás a mi amiga china SUE MI y tras este brillante golpe de gracia te das una media vuelta airosa y caminás esplendida como una top alejándote con zancadas de gacela de la escena del crimen y una vez que la perdés de vista, ahí recién podés desesperarte y correr como Forrest Gump a llamarle a tu abogado de confianza para que te preste sus servicios. A continuación, sacás nuevamente a la Alexis Carrington que mora en tu interior, te das un golpecito, te hacés sacar un par de fotos en emergencias médicas (acá vas a tener que contener tu sonrisa de Miss y poner cara de Bambi degollada) y te hacés la víctima ya que la agredida fuiste vos.... quedáte tranquila ya que lo que estás haciendo no es mentir ni nada por el estilo, simplemente estás exteriorizando aquellas heridas que los fiscales jamás van a ver porque para ELLOS las HERIDAS DEL ALMA no existen!!! Ayepa!!! Por algo tenemos ingenio Guaraní!!!!

3. DÍA INTERNACIONAL DE LA ALERGIA A LAS ROSAS. Si te cae tu novio, marido, chongo, amante, proyecto de, o lo que sea con un ramo de rosas, o en el peor de los casos, una rosa ÚNICA con un cartelito impreso en letra cursiva rosada que dice Te Amo (que seguramente compró en la calle a último momento) En el acto empezás a estornudar violentamente.... asegurándote de acertarle bien con cada uno de tus mocos. Si se trata de una reincidencia (ya que el año pasado te vino con el mismo chistecito de la rosita y no captó la indirecta) directamente tomás las rosas y con una sonrisa de miss le decís: “Gracias, voy a ponerlas en agua”, y te vas derechito al baño más próximo y la depositas en el INODORO asegurándote bien de que vea tu recorrido y que oiga el SPLASH!!! Ya no estamos como para rosas!! Pero por favor... queremos ROCAS!!! Y de las grandes y luminosas.

4. SE IMPLEMENTARÁ LA LISTA DE REGALOS. Como ya sabemos que no hay nada más necio y estúpido que un novio, marido, chongo o proyecto de, a la hora de interpretar nuestros deseos y de elegir nuestros regalos, hacésela fácil, le escribís bien detallado lo que querés, dándole varias alternativas (no te olvides de especificar color, modelo, tienda, local y por supuesto llamar a la tienda para darle todas tus especificaciones a la vendedora porque seguro que la lista se le va a perder en el camino, y su cerebro de orangután no recuerda nuestras NECESIDADES). Nada de hacerse las mosquitas muertas y de decir la frase PATÉTICA: el mejor regalo es tu amor. NADA DE CURSILERÍAS DE ESTE GENERO POOOR FAVOOOOOR!!! Y menos aún se hagan las modestitas dejándole a su libre voluntad la elección de tu regalo!! BIG NO-NO. Salvo que tu marido o novio sea tremendamente gay jamás va a embocar tu gusto ni tu talle. Lo más probable es que termines con un regalo tan patético como la PATETICA libertad de elección que le diste... preparate bien nomás ya para la licuadora o la tanga microscópica que no le entra ni a tu hija de 5 años... y mirá que con algunas amigas hemos hecho LISTAS INTERMINABLES de regalos PATETICOS recibidos por nuestras medias naranjas.

5. DÍA INTERNACIONAL DEL ENDEUDAMIENTO GLOBAL DE LOS NOVIOS/MARIDOS: Sean ambiciosas. Con la boca se pide lo que se quiere. Nada de hacerse la ambigua o de la comprensiva. SEAN EXIGENTES!!! Dale rienda suelta a tu listita interior. No te controles. Pedí todo, desde el viaje a Marruecos, el día en un SPA, una orgía de compras, no te contengas!!!! Les cuento algo para que les sirva de inspiración: una amiga joyera me dijo que generalmente los maridos eligen el regalo de la esposa y de la amante al mismo tiempo y siempre la joya más cara e importante es para la amante!!!! RECUERDALO en el momento de pedir tu regalo y con una sonrisa gigante decile bien clarito que querés un ROLEX (por que todas sabemos que te lo merecés), una VAIO, unos aros de brillante o un par de botas de BGN. Si te pone cara de susto, nada de tenerle piedad a sus bolsillos. Recordá lo que te dije de la joyera y saca la villana que hay en vos, recordándole con una sonrisa tan gigante y amorosa como la anterior que en cada una de esas tiendas puede comprar a cuotas con su tarjeta de crédito..... ver la cara de estúpido del orangután de tu novio, marido o proyecto de... NO TIENE PRECIO!!!!

6. EL IMPLEMENTO INMEDIATO DEL SANEAMIENTO NACIONAL DE SAPOS Y RENACUAJOS: Si tu príncipe resultó ser un sapo o peor aún: si seguís esperando que tu sapo se convierta en príncipe. Ponete el equipo de fumigación y echale humo. Acomodate bien los ovarios y decile a Julio Rodolfo Arnaldo Andrés que pegue la vuelta.... Como Pimpinella... no te olvides de sacar tu voz de gallito al más puro estilo villanesco de Lupita Ferrer (que con su tonito agudo y diabólico era capaz de mandar a la Cochinchina hasta a Gandhi sin un ápice de arrepentimiento). Afiná el tonito y decíle bien clarito: “Vete de aquí Julio Rodolfo Arnaldo Andrés” y por más de que te diga 1000 veces: “Es que tu no entiendes María de los Dolores Julieta Nicoletta Valentina” no le escuches que te puede volver a engatusar. Recuerda que es un sapo y vos ya no sos una protagonista en apuros pues ya sacaste al fin a tu Lupita Ferrer interior. SE CRUEEEL y recordate que mejor sola que mal acompañada. Total esta noche hay miles de farras para solteros y solteras y como ya sos una villana no vas a guardar ni un minuto de luto x tu sapo anterior. Y perdé cuidado, que por más que jamás se haya acordado de su aniversario de festejo, se va a recordar por el resto de su vida que VOS le chutaste el día de los enamorados....KEEP WALKING JULIO RODOLFO ARNALDO ANDRÉS!

Recuerden mis adoradas lectoras:

- el príncipe azul no existe.
- los sapos son sapos y nada más que sapos.
- las rosas son para el jardín de nuestras abuelas.
- el mejor regalo siempre es el mejor amigo de una mujer!! (no seas pues necia... NO ES PUES UN PERRO ESTUPIDA!!! DIAMONDS ARE A GIRLS BEST FRIEND!!! HELLOOOO!!!)
- si tu príncipe no te satisfizo, no te satisface, no te ha satisfecho lo más probable es que tras pasar por todas las conjugaciones posibles terminarás en la del FUTURO SIMPLE de que no te satisfará JAMÁS!!!
- Todas ustedes mis divas subtropicales del melodrama son AUTENTICAS princesas. Recuérdenlo siempre!!! Y recuerden que Uds. lo valen todo. Quiéranse mucho en este día, ya que tienen que estar antes que nada eternamente enamoradas de uds. mismas, respétense mucho y si no las respetan háganse respetar. Un sopapito acá otro allá... ya aprenderán.
- Aguante la violencia de San Valentín! Que al pobre santo lo martirizaron y nosotras nos empecinamos en rodearnos de cursilerías! A empuñar las guachas y a dar candela al más puro estilo pila: Siiiiuuugaaaa pueeeeee!!!! Pichiu pichiu con el guachazo!!!!
- nada de canciones romanticonas onda mi vida eres tu (tema de la telenovela cristal...por si no lo recuerdan): échenle azúcar como Celia Cruz y que le den candela!!!! “Que le den candela, ay que le den castigo, que lo metan en una olla y que se cocine en su vino que le den candela, que le den castigo que lo borden de una cometa y que luego corten el hilo (azúcar, azúcar!) Ese hombre que tu tienes buena amiga, si yo fuera tu le dejaría, las maletas en la puerta y una nota que dijera a partir de este momento que te cocine tu abuela.

HEEE DIIIICHO!!!!

Feliz día de San Valentín a todas mis queridas lectoras con sus príncipes, sapos y orangutanes!!!! Juntas hacemos un zoológico!!!! Pero no podemos vivir sin ellos!!!